El rector de la Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM), José Narro Robles, recomendó al próximo gobierno federal que se convenza no sólo en el discurso, sino en las acciones que la educación debe ser una prioridad para el país en los próximos años.

Aseguró que se necesita un programa educativo de largo aliento, no de seis años, sino por lo menos de una década, a fin de fortalecer la educación en todos sus niveles, desde prescolar hasta posgrado, en calidad y cobertura, que no son excluyentes.

Tras inaugurar la décima sesión de la Coalición de Trabajadores Académicos en Situación Precaria (COCAL), que agrupa a profesores y sindicatos universitarios de Canadá, Estados Unidos y México, también manifestó su preocupación por el incremento en el número de aspirantes que cada año se quedan al margen de las instituciones públicas de educación superior, y enfatizó que nuestro país no puede darse el lujo de tener a jóvenes fuera de las aulas y el empleo.

Afirmó que el problema de los aspirantes no aceptados no sólo se presenta en la zona metropolitana del valle de México, sino en diversos estados del país donde la cobertura es inferior al 20 por ciento de la población en edad de cursar estudios universitarios.

Es una situación, subrayó, “que me preocupa, lo he venido diciendo, tuve una disputa muy fuerte, muy respetuosa, que por cierto la realidad acabó dándome la razón –en referencia al número de jóvenes que no estudian ni trabajan y que supera los 7 millones– sobre la problemática que les afecta, pues necesitan mayores esfuerzos, recursos y oportunidades”.

En el acto, que se realiza por primera vez en nuestro país, y fue encabezado por el secretario general del Sindicato de Trabajadores de la UNAM, Agustín Rodríguez, y por Bertha Rodríguez Sámano, secretaria general de la Asociación Autónoma del Personal Académico de la UNAM (AAPAUNAM), Narro Robles subrayó que los trabajos del encuentro que concluye este domingo serán de la mayor relevancia para nuestras instituciones.

La educación en todos sus niveles, agregó, es un bien público indispensable para avanzar en el desarrollo de nuestras naciones y para conseguir que algunos de los problemas de siempre como la desigualdad, la pobreza y la ignorancia puedan ser vencidos.

En entrevista, afirmó que la prioridad que se debe dar a la educación también debe reflejarse en los presupuestos de las instituciones públicas de educación superior. Y anunció que la UNAM, así como diversos especialistas y asociaciones del sector, trabajan para ofrecer una visión plural, pero al mismo tiempo de consenso que permita a los diputados, senadores y al Ejecutivo federal, incluir para el próximo ejercicio presupuestal recursos que están dentro de las posibilidades nacionales.

México, subrayó, no puede darse el lujo de no invertir en educación superior, en ciencia e innovación. Hay una oportunidad para hacerlo y debemos empezar el próximo presupuesto para 2013.