Este viernes, cinco presuntos pistoleros murieron en un nuevo enfrentamiento entre sujetos armados y elementos del Ejército Mexicano en el municipio de Cedral, San Luis Potosí, por lo que en sólo dos días se reportó la muerte de 19 personas en esta entidad, en hechos atribuidos al crimen organizado.

La refriega ocurrió en el bulevar Flores Magón a las tres horas. La persecución duró casi tres horas y se extendió hasta el centro de la ciudad, donde quedó un vehículo abandonado, el cual más tarde fue incautado.

El ataque ocurrió cuando personal castrense que vigilaba las inmediaciones de una gasolinera entre los municipios de Cedral y Venado detectaron actitud sospechosa en los tripulantes de una camioneta Liberty con placas de Coahuila.

Cuando los militares se acercaron a la unidad para hacer una revisión de rutina fueron agredidos con armas de fuego, ataque que repelieron, y dieron muerte a cinco sujetos.

Según versiones extraoficiales, tres mujeres menores de edad presentes en el sitio del enfrentamiento rendirían declaración, pues acompañaban a quienes viajaban en la camioneta.

Al respecto, el presidente del Congreso local, el panista Pedro Pablo Cepeda Sierra, convocó a formar un frente contra el crimen organizado con la participación de todos los sectores sociales del estado. Se debe apoyar al gobierno estatal del priísta Fernando Toranzo en sus esfuerzos por enfrentar a la delincuencia, dijo.

En Zacatecas, en distintos enfrentamientos entre presuntos miembros de los cárteles de Los Zetas y del Golfo contra elementos de corporaciones de seguridad federales y estatales, murieron nueve presuntos delincuentes y 17 fueron detenidos en horas recientes.

En Chihuahua, cinco personas fueron ejecutadas en distintas acciones vinculadas a la delincuencia organizada. Uno de los fallecidos es un oficial de tránsito, quien fue asesinado por un grupo armado, frente a las oficinas de la Dirección de Vialidad y Tránsito del estado. Fue identificado como Sergio González.

Además la fiscalía general presentó a tres presuntos responsables de la masacre del Bar Colorado, ocurrida el pasado 20 de abril, donde 16 personas murieron, entre ellas los periodistas Javier Salinas y Javier Moya.

Los detenidos son Jaime Cuevas, Jesús Manuel Valenzuela e Iván Enrique Montañés, señalados como los autores materiales.

Por otro lado, dos delincuentes lanzaron una granada de fragmentación tipo K400 contra la segunda sección de la Academia de la Policía y Vialidad Estatal de Guadalajara, Jalisco.

La agresión ocurrió a las 21:15 horas del jueves. Un perro de la corporación murió y dos resultaron heridos por las esquirlas. Asimismo, un sujeto fue asesinado en el municipio de Puerto Vallarta.

En el resto del país, autoridades policiacas de cuatro entidades documentaron el homicidio de nueve personas. Cinco fallecieron en Guerrero, dos en Morelos, una en Guanajuato (el occiso fue identificado como Luis Felipe Solís Salgado, quien era coordinador de proyectos de la Secretaria de Obra Pública) y otra en Coahuila.

En esta última entidad la víctima era un agente del grupo antisecuestros de la Procuraduría General de Justicia del Estado, quien trabajaba encubierto en una banda de secuestradores y murió a tiros cuando fue descubierto, al negociar el pago de un rescate.

El tiroteo ocurrió en el estacionamiento de un centro comercial al norte de Saltillo. El policía fue llevado a un hospital adonde llegó muerto.

Por la tarde, fuentes de la Secretaría de la Defensa Nacional informaron del hallazgo de diez cadáveres de supuestos miembros de Los Zetas en una camioneta Ford Explorer que desconocidos dejaron abandonada a la salida norte de la ciudad de Fresnillo. Todos los cadáveres tenían señales de tortura y el llamado tiro de gracia.