Querétaro, Qro., 10 de agosto. El edil de San Joaquín, Belem Ledesma Ledesma, reveló que en esa demarcación operan 30 minas de forma clandestina, las cuales no cuentan con permisos de la Secretaría de Economía para extraer mercurio, plata o zinc.

En los años 70 hubo en la zona auge económico por la extracción de metales. Posteriormente decayó y empezaron a cerrar. Sin embargo, en los recientes tres años se reactivó al subir el precio del kilogramo de esos metales.

Habitantes de San Joaquín comenzaron a extraer los metales y venderlos al mejor postor sin contar con permisos oficiales, pese a que en algunos casos sí los han solicitado. Además carecen de capacitación y medidas de seguridad para ingresar a los pozos.

Alrededor de 150 familias del municipio de San Joaquín han hecho su forma de vida la extracción de metales, principalmente mercurio, el cual es comercializado hasta en mil pesos el kilo.

Aunado a los riesgos de inseguridad que representa para los gambusinos de mercurio el ingresar a las minas sin protección, también enfrentan riesgos en su salud, porque la fundición del mercurio lo realiza de forma artesanal, y algunos casos, en los patios de sus domicilios particulares.

Al respecto, el alcalde priísta comenta: “La necesidad de la gente es más grande que el riesgo: si la familia no tiene para comer, si se acabó la chamba en Estados Unidos, si batallan en Querétaro y tienen esa alternativa pues dicen aquí está la papa de mis hijos’”.

Por ello, el munícipe solicitó la intervención de las autoridades estatales y federales para que les den la concesión a los lugareños organizados, y no a empresarios ajenos a la localidad, y les impartan capacitación.