Hoy, Las Kumbia Queers presentan su tercer disco, Pecados Tropicales, en la ciudad de México, y mañana en el Festival Afrocaribeño, que se desarrolla en el puerto de Veracruz. En entrevista con La Jornada, dos de sus integrantes, Ali Gardoki y Juana Chang, dan los pormenores del material.

Para iniciar, Ali (güiro y voz) menciona que son seis los pecados tropicales, porque “pues somos seis integrantes y cada una se identifica con un pecado; por ejemplo, a mí me domina la gula. La ira, la pereza y la lujuria están muy presentes en la banda. El título también es un guiño a Manuel Puig y su libro Los siete pecados tropicales”.

El génesis de Las Kumbia Queers se remonta a la ciudad de Buenos Aires, en enero de 2007, para ser precisos, donde seis locas punk and rollers deciden autoexplotar su lado cumbianchero y queer, para gestar lo que llamaron tropi-punk. Ali Gua Gua viajaba a la capital argentina en autobús, desde México; Las She Devils organizaban el octavo Festival Belladona de Mujeres Rebeldes en esa ciudad, y Juana Chang giraba con su camino del indie por todos lados. Se conocen y deciden juntarse para tocar.

La rotunda negativa de Ali Gua Gua a formar una banda más de rock, sumada a la pasión de Inés por la cumbia y a la destreza de Flor, la tecladista, con el humor de Juana, el empecinamiento de Pila Zombie y el bajo de Pat las llevan a lo más punk de sus carreras: versionar temas de sus bandas favoritas al ritmo de cumbia. Así que Black Sabbath, The Cure, The Ramones, Madonna, Nancy Sinatra, Bronco, más tres temas originales conviven en su primer larga duración: Kumbia Nena! (2007) editado en Argentina, México, Chile y Japón.

Era un juego

Juana Chang considera que la existencia de los tres discos de Las Kumbia Queers ha sido casi fortuita: Empezamos jugando y se fue convirtiendo en algo más serio. Nos metimos de lleno a la cumbia; aprendimos a tocar y a componer en este estilo. El primer disco es más roquero, el segundo más cumbianchero y este es más abierto, más nosotras; hay de todo un poco.

Ali menciona que lo que las ha mantenido juntas son las ganas de tocar, de dedicarnos a la música al ciento por ciento, viajar de un lado a otro y hacer todo nosotras mismas, con ayuda de amigos talentosos.

Juana explica que estos Pecados Tropicales “fueron temas que fuimos tocando y los juntamos para hacer el disco, además de otras canciones que queríamos ejecutar como las versiones de Flema y Caballo viejo, un clásico de clásicos. Fue caótico e intenso; trabajamos solas, sin productores, por lo que fue todo un reto”.

–¿Cómo se sienten musicalmente hablando?

Juana: “Nos sentimos muy fuertes tocando en vivo, afianzadas en el sonido, cuando empezamos era más inconsciente y disparejo, pero fuimos investigando y puliendo el show”.

Finalmente, Juana y Ali coinciden en precisar que los comentarios que han recibido del disco es que está buenísimo, y no se puede parar de bailar. Ahora lo presentaremos y queremos escuchar otros comentarios. Estamos muy felices de estar en México de vuelta. Esta es nuestra quinta gira, y luego vamos al Afrocaribeño, en Veracruz (mañana sábado); también vamos a Oaxaca. Estaremos poquito tiempo, por lo que los invitamos a bailar con nosotras.

Las Kumbia Queers, hoy en el Pasagüero (Motolinia 33. Centro Histórico), a las 21 horas.