La rusa no pudo hacer triplete en salto con garrocha; la cubana Silva ganó plata, detrás de la estadunidense Suhr
Sánchez, bicampeón en 400 vallas; el boricua Culson, bronce
Santos, otro dominicano, segundo en 400 planos
Este bronce me motiva para no retirarme, dijo Yelena IsinbayevaFoto Ap
Martes 7 de agosto de 2012, p. 2
Londres, 6 de agosto. La rusa Yelena Isinbayeva no pudo ganar un histórico tercer oro olímpico consecutivo en salto con pértiga y se llevó una medalla de bronce, que la motiva para no retirarse, mientras la cubana Yarisley Silva se quedó con la presea de plata, primera para su país en dicha prueba. En 400 metros vallas, el dominicano Félix Supermán Sánchez reconquistó la dorada, venciendo a los favoritos.
La pertiguista estadunidense Jennifer Suhr se hizo del título al librar la barra de 4.75 metros en su segundo intento.
Isinbayeva obtuvo el tercer puesto, con 4.70 metros, por detrás incluso de Silva, plata con 4.75, misma altura que la ganadora, pero un nulo con el listón en 4.45 la relegó. La rusa aspiraba a ser la primera atleta triple campeona olímpica en pruebas individuales.
A pesar de ello, la Zarina de la pértiga se mostró satisfecha de poder irse con una presea de Londres 2012, afirmando que esto tiene un efecto importantísimo en su motivación.
“Estoy realmente contenta. Esto para mí vale como una medalla de oro. He tenido muchas decepciones en el pasado, en estos tres recientes años. Creo que este bronce me está diciendo ‘Yelena, no pares’, en un momento en el que me lo había llegado a plantear”, admitió.
La rusa, única en haber superado los cinco metros –en ocho ocasiones–, ostenta el récord mundial al aire libre (5.06), pero en las últimas temporadas tuvo problemas en las grandes citas, desde su éxito en la capital china hace cuatro años.
En tanto, Silva mostró su alegría por haber dado a su país la primera medalla en su historia en salto con garrocha femenil.
En tanto, el eterno Supermán Sánchez ganó este lunes su segundo oro olímpico en 400 metros vallas, cuando parecía estar en el declinar de su carrera, después del triunfo en Atenas 2004. Sorprendió a los favoritos y marcó el mejor tiempo del año.
Cuando todo anunciaba un duelo entre el puertorriqueño Javier Culson y el británico Dai Greene, apareció el dominicano y se hizo con la victoria, con 47.63 segundos, mientras el estadunidense Michael Tinsley ganó la plata (47.91), relegando a los favoritos a la tercera y cuarta posiciones. Culson terminó con el bronce (48.10), con lo cual, por primera vez en la historia, dos latinoamericanos ocuparon un puesto en el podio de esta prueba.
El atleta, de casi 35 años, logró así un gran regreso en Londres. Sánchez se había coronado en Atenas 2004, mientras en Pekín 2008 tuvo una mala actuación al ser eliminado en la primera ronda. En los Mundiales de Daegu 2011 dio indicios de recuperación, al ser cuarto en la final.
El dominicano se mostró sorprendido el sábado por su gran marca en las eliminatorias, que remitía a los tiempos en los que estuvo invicto en 43 carreras entre 2001 y 2004 y hacía honor a su apodo de Superfélix.
Sánchez aseguró que su sorprendente renacimiento se debe a que está libre de las muchas lesiones que lo aquejaron en los últimos años.
Ahora estoy en buena forma; me siento fuerte, la velocidad está ahí, la técnica también. Y lo más importante: tengo la confianza de que puedo competir con cualquiera
, advirtió el atleta, a quien muchos habían recomendado que se retirara.
Con este triunfo, Sánchez se convierte en el campeón olímpico de más edad de la historia en 400 metros vallas. En el Mundial de Daegu 2011 fue cuarto, y en los Panamericanos de Guadalajara 2011 quedó en tercer puesto.
Culson también hizo historia para su país. El boricua es discípulo de Sánchez, al que considera un ejemplo. Los dos caribeños son buenos amigos y el dominicano nunca le ha escatimado un consejo.
Estoy muy orgulloso de este niño, yo le he dado consejos y él es un buen talento
, contó el dominicano.
“Hace tres semanas estuve hablando con él después de una carrera en Londres y le dije: ‘Mira, esa medalla olímpica es tuya, basta de sentirse sin confianza’. Pero también le advertí: ‘Yo voy a estar también luchando contigo, prepárate’”.
Supermán Sánchez fue campeón del mundo en Edmonton 2001 y París 2003, además de plata en Osaka 2007.
En la final, no mostró signos de flaqueza en la última recta, en la calle siete, mientras Tinsley y Greene intentaron acercarse al oro, al tiempo que Culson se derrumbaba en los últimos metros y estaba cerca de perder incluso el bronce. Taylor parecía que podía alcanzar a Supermán, pero tocó la última valla. Sin embargo, el caribeño se mantuvo a la cabeza, mientras Tinsley superó a unos cansados Culson y Taylor.
Sánchez, nacido en Nueva York y que decidió correr para el país de sus padres, se arrodilló tras cruzar la línea de meta; llevándose las manos a la cara, sacó una foto de su abuela que tenía guardada en la camiseta y la besó.
No tengo ni idea de cómo estará viviendo el pueblo dominicano esta victoria. Habrá una alegría gigantesca. Esperaban los títulos mundiales (en 2001 y en 2003), pero nadie esperaba esto
, admitió.
Mucha gente decía que debía retirarme, pero todavía estoy aquí. Todos los dominicanos estarán celebrando ahora
, añadió.
En la entrega de medallas, Superfélix lloró sin poder contener la emoción. Culson, quien tenía como ídolo a Sánchez, vio de nuevo ganar a su maestro.
Rusa supera a africanas
En los 3 mil metros con obstáculos, la rusa Yuliya Zaripova resistió el empuje de las fondistas africanas y se proclamó campeona con 9.06.72, por delante de la tunecina Habiba Ghribi (9.08.37) y la etiope Sofia Assefa (9.09.84). La vigente campeona olímpica y plusmarquista mundial, la rusa Gulnara Galkina, no terminó la prueba este lunes, abandonando a mitad de la carrera.
Otro éxito para República Dominicana fue la medalla de plata que ganó Luguelín Santos (44.46 segundos) en los 400 metros planos, donde el granadino Kirani James, campeón del mundo en Daegu 2011, obtuvo oro (43.94) y el trinitense Lalonde Gordon, bronce (44.52). El anterior campeón olímpico, el estadunidense LaShawn Merritt, lesionado, había quedado eliminado en las calificaciones.
En otra competencia, la bielorrusa Nadzeya Ostapchuk se proclamó monarca de lanzamiento de bala, con 21.36 metros. Ostapchuk, campeona del orbe en 2005, superó a la neozelandesa Valerie Adams, triple campeona del mundo y actual poseedora del título, que no pudo lanzar más allá de 20.70 metros, y a la rusa Evgeniia Lokodko, quien se colgó el bronce con 20.48 metros.