La productora mexicana Dulce Kuri murió la noche del sábado a consecuencia de una insuficiencia cardiaca, a la edad de 64 años; a ella se le deben trabajos determinantes de la cinematografía mexicana, como Mojado Power (1981), de Alfonso Arau; Sobrenatural (1996), de Daniel Gruener; Danzón (1991), de María Novaro, y Frida, naturaleza viva (1986), de Paul Leduc.

Jorge Sánchez, quien a lo largo de 30 años trabajó con Kuri, informó: Ya está descansando; desde hace tiempo padecía del corazón. Hace poco más de un año se retiró para atenderse. Murió en su casa acompañada de sus familiares.

Bertha Navarro, colega y amiga de Dulce Kuri, dijo a La Jornada: Fuimos compañeras durante muchos años. Estuvimos juntas en ese momento en que empezamos a dar fuerza al cine nacional. Es una pérdida increíble, porque todo mundo la quería. Ella hizo grandes cosas; su importancia radica en haber estado en películas importantísimas. La voy a extrañar muchísimo.

Respecto del trabajo de producción que desarrolló Dulce Kuri, Navarro consideró: Hizo películas muy, muy buenas... fue una persona que batalló muchísimo. Hay que reconocer su espíritu creativo para hacer las cosas cuando parecía medio imposible hacer cine mexicano, sobre todo para las mujeres.

Navarro agregó: Nosotras nos consultábamos, nos aconsejábamos y repartíamos, porque tampoco podíamos hacer todo. Estuvimos juntas en épocas en las que era difícil producir cine en México. Siempre dio su apoyo y supo elegir el talento para hacer buenas películas... Siempre la recuerdo por su sonrisa, siempre estaba de buen humor, y por su buena disposición; así encaró siempre su trabajo con optimismo.

El productor Jorge Sánchez añadió: “En términos generales la conocí cuando hicimos una serie para televisión, La cabeza de la hidra, que nunca fue emitida. Estaba basada en la novela de Carlos Fuentes y la dirigiría Paul Leduc. Luego tuvimos oportunidad de trabajar en las películas de María Novaro, como Lola, Danzón y El jardín del Edén, entre otras... ella era una productora muy especial porque tenía una relación muy estrecha no sólo con los directores, sino con la gente del staff, los fotógrafos, los actores; era de esas personas que ponían toda su capacidad para sacar una película adelante, pero pocos reconocieron su trabajo e importancia. Fue una persona muy valiosa para el cine mexicano”.

Fue importante como productora; además de sus películas, era una persona que llenaba de cordialidad y al mismo tiempo muy firme en sus apreciaciones y decisiones inherentes a una rodaje o a la preparación de una película. Tenía un profesionalismo impecable.

Sánchez concluyó: También fue muy combativa. Después de esta jornada electoral platiqué con ella; estaba entre decepcionada y encabronada, porque las cosas no sucedieron como a ella le hubiera gustado.

Por su parte la cinedocumentalista Luisa Riley, amiga de Dulce Kuri, mencionó: Fue una de las grandes productoras del cine nacional, una mujer con mucha experiencia, de pasión extrema por el cine. Hacía cualquier trabajo por convicción.

Riley agregó: Dulce supo reconocer los proyectos cinematográficos que tenían un sentido con la época y el momento del cine, cuando los recursos para producir cine mexicano eran muy limitados, ella se guió por los proyectos que tenían ideas y contenido. Así era ella.

Condolencias

Actores como Damián Alcázar y Dolores Heredia, así como el Instituto Mexicano de Cinematografía (Imcine), lamentaron la muerte de la productora.

Imcine lamenta profundamente el sensible fallecimiento de Dulce Kuri, destacada productora del cine mexicano, señaló dicho instituto en su cuenta oficial de Twitter.

El actor Damián Alcázar expresó: Adiós a nuestra amiga Dulce Kuri; gran trabajo por el cine mexicano... Se le extrañará sin duda.

La actriz mexicana Dolores Heredia escribió: Buen viaje querida Dulce Kuri, mientras el Centro Universitario de Estudios Cinematográficos (CUEC) expresó: Lamentamos el fallecimiento de Dulce Kuri, productora comprometida con el cine nacional.

Entre los trabajos de Dulce Kuri figuran Crónica de un desayuno, Sin dejar huella, La historia de I y O, Santo Luzbel, Un año perdido, Contigo a la distancia, Un embrujo, Barroco, ¿Cómo ves? y Viaje a Cuba, entre otras muchas. El último trabajo de la productora mexicana fue en el filme animado La revolución de Juan Escopeta.