Sábado 21 de julio de 2012, p. a36
Londres, 20 de julio. A unos cuantos días de que comiencen los Juegos Olímpicos Londres 2012, con la antorcha olímpica recorriendo la capital británica, con las calles congestionadas y la llegada de prácticamente todas las delegaciones de la familia olímpica, se percibe un entusiasmo creciente acompañado de inconvenientes debido a la gran cantidad de visitantes que arriban a la metrópoli a orillas del Támesis.
Las Olimpiadas de Londres estarán acompañadas de una magna celebración cultural sin precedentes en la que el gran dramaturgo William Shakespeare ocupa un lugar preponderante. Cientos de actores, directores y dramaturgos de las culturas más diversas viajarán estos días a la capital británica para interpretar sus obras en numerosos idiomas en el contexto del World Shakespeare Festival.
Mis veladas más memorables en el teatro han sido escuchando a artistas provenientes de todo el mundo que muestran cómo Shakespeare les habla a sus comunidades y a su cultura
, afirma la directora del Festival Londres 2012, y de la Olimpiada Cultural, Ruth Mackenzie, que no se intimidó ante semejante empresa.
El riesgo de una producción
Por supuesto, toda nueva producción es un riesgo; algunas quedan en la memoria para siempre, otras pueden no ser exitosas, pero esa es la naturaleza de la innovación, así como en el deporte, no todos ganan medallas de oro
, afirma en conversación con La Jornada.
Mackenzie está convencida de que con Shakespeare el Reino Unido tiene la dramaturgia más exitosa del mundo.
Bautizado en la Iglesia de la Sagrada Trinidad de Stratford upon Avon en 1558 y enterrado ahí en 1616, William Shakespeare no fue célebre en su tiempo. Siete años después de su muerte, sólo un par de obras suyas habían sido puestas en escena por su vieja compañía, King’s Men (Hombres del rey), cuyos miembros, creen investigadores, fueron quienes recopilaron su obra y la divulgaron.
La fuerza de Shakespeare es la fuerza del lenguaje hablado, que escribió sin pretensiones ni afecciones y ha convertido su obra en un legado universal. Según Mackenzie, es el dramaturgo más popular del mundo, cuya obra relata historias que transportan al espectador a un mundo de intrigas, traiciones y lucha por el poder. Miserias humanas que siguen teniendo vigencia hoy en día.
Actores profesionales y aficionados, escuelas, iglesias, museos y numerosas instituciones participan en el mayor festival dedicado al autor de Hamlet, Macbeth y Romeo y Julieta. Siete mil 200 aficionados interpretarán sus obras en pubs (bares), parques, en castillos e iglesias.
El Globe Theatre, en la rivera del Támesis, muestra durante tres semanas un programa titulado Globe to globe, integrado por 37 obras en distintos idiomas e interpretadas por compañías de teatro de varios países. Se escucharán los idiomas más diversos, desde japonés y alemán, hasta hindi, árabe y hebreo.
En el festival participa la Compañía Nacional de Teatro de México, que, en colaboración con la Royal Shakespeare Company, presenta la obra A soldier in every son (Un soldado en cada hijo), una trilogía azteca de Luis Mario Moncada.
Shakespeare es el broche de oro del ambicioso Festival Londres 2012, el punto culminante de la llamada Olimpiada Cultural, que comenzó hace cuatro años con el objetivo de mostrar previamente a los Juegos Olímpicos la fuerza y diversidad cultural del Reino Unido, que reúne propuestas tan diversas como la producción My fair lady, hasta una muestra con las figuras de animación Wallace & Gromit.
Ahora se ha sumado la participación de unos 25 mil artistas de las naciones participantes en las Olimpiadas, conformando el festival cultural más grande y ambicioso de la historia británica, que con un costo de 11 mil millones de libras esterlinas acompañará durante 12 semanas la celebración de los Juegos Olímpicos y Paralímpicos Londres 2012.
Entre los actos más destacados figuran el River of music (Río de la música), que albergará durante este fin de semana, antes de la inauguración de la cita olímpica el 27 de julio, a jóvenes músicos provenientes de todo el mundo actuando en seis escenarios a lo largo del Támesis.
Los poetas de la comunidad olímpica tomarán parte en el festival Poetry parnassus, en el Centro Southbank. Rocío Cerón, cuyo trabajo experimental combina poesía, música, actuación y video, es la única representante de México.