Su baja escolaridad los hace presa del crimen, revela un estudio
También deberá buscar que se reintegren a la cultura de su país
Lunes 16 de julio de 2012, p. 18
El próximo gobierno enfrentará el reto de crear fuentes de empleo para millones de mexicanos que retornan al país desde Estados Unidos, ya que su baja escolaridad los hace presa fácil del crimen organizado al no hallar trabajo en su país de origen, advierte la investigadora Carla Pederzini Villarreal, del Departamento de Economía de la Universidad Iberoamericana (Uia).
Explica que la mayoría de los que retornan tienen entre 25 y 29 años, con baja escolaridad, y al no hallar empleo son candidatos a ingresar en las filas del crimen organizado
, indica en el estudio Selección en tiempos de crisis: explorando la selectividad de los migrantes de retorno en México durante 2005-2010, que es parte de una investigación binacional México-Estados Unidos coordinada por Georgetown University, Ciesas y la Uia.
La investigadora establece en el análisis que incluso jóvenes naturalizados estadunidenses de las familias mexicanas que retornan no han construido redes sociales, no saben hablar español y enfrentan dificultades de integración cultural
, además de que los jóvenes que retornan a México con su familia se enfrentan a un país sin empleo, lo que los ubica entre aquellos que no estudian ni trabajan o, en el peor de los casos, los conduce a las filas del crimen organizado
, destacó.
Añade que, de 2005 a 2010, más de cien mil mexicanos que retornaron al país fueron hombres mayores de 40 años, que no tuvieron acceso a la educación, no lograron resolver su situación migratoria y que dejaron de visitar por mucho tiempo sus comunidades por la dificultad que representaba cruzar la frontera sin papeles, situación que contrasta con la de mujeres, cuyo número de retorno es menor, porque la mayoría se desempeña en el mercado doméstico, lo cual les permite permanecer invisibles
o entremezcladas con la población nativa.
De acuerdo con el estudio, 139 de cada mil mexicanos hombres en Estados Unidos retornaron a México en 2010, en contraste con 37 de cada mil mujeres. Estamos en una etapa de bono demográfico, hay mucha gente en edades jóvenes y el mercado laboral no les está dando alternativas para integrarse y la opción tampoco es la migración ni a Europa ni a Estados Unidos
, apuntó.
La experta en demografía de la Uia dijo que México enfrentará el reto de incorporar a la cultura y al empleo a las familias mexicanas deportadas, por las políticas antinmigratorias que se han recrudecido desde 2009 con la Ley Arizona SB1070, o la crisis económica mundial.
Una situación compleja que enfrentará el próximo gobierno federal es la reintegración a México de nuestros migrantes, que por mucho tiempo fueron los héroes que se iban y regresaban con dinero y triunfantes sólo que ahora regresan con una mano atrás y otra adelante
, problema que se acentúa con aquellos jóvenes de familias mexicanas que se quedan en Estados Unidos con la esperanza de resolver la situación de sus padres para que puedan regresar.
Considera que México no está en una situación “tan mala en lo económico, siempre y cuando mantenga o incremente sus inversiones sobre todo en el mercado automotriz, aproveche su situación geográfica estratégica y prepare el capital humano mexicano en el sector técnico para insertarlos en los sectores económicos que se están desarrollando, sobre todo en la industria".