Tras los festejos comienza titánica labor de limpieza en Pamplona
Domingo 15 de julio de 2012, p. 8
Pamplona, 14 de julio. El sábado a la salida del sol, el potente chorro de agua que limpia las montañas de basura en las calles de Pamplona intenta no mojar a centenares de personas que siguen todavía de juerga, disfrutando de las fiestas de San Fermín y sus encierros mundialmente conocidos. El balance de los encierros este año fue de 38 heridos, cuatro de ellos en el último recorrido del feste- jo, este sábado en las callejuelas de esta ciudad del norte de España. ¡Cuidado!, grita un turista a sus dos amigos que se toman unas cervezas. Tienen el tiempo contado para sortear el chorro de agua, cargado de vasos de plástico y desechos de todo tipo.
No es nada fácil la limpieza de esta ciudad que vive noche y día al ritmo de los sanfermines, inmortalizados por el escritor Ernest Hemingway en su novela Fiesta (The sun also rises) de 1926. La fiesta no se limita a las carreras de los mozos delante de los toros, que reúnen a miles de turistas y apasionados cada mañana a lo largo de una semana, sino que se prolonga hasta la noche en los bares abiertos hasta las seis de la madrugada. Y atrae a unas 500 mil personas en una ciudad de 200 mil habitantes.
Toneladas de basura
Cuando hay mucha gente en la calle, pasar entre ellos es muy peligroso porque los camiones son grandes
, comenta Karlos Teres, responsable de un equipo de ocho agentes de limpieza, quienes cada mañana intentan evacuar toneladas de desperdicios acumuladas en las calles.
En ocasiones el trabajo se complica, porque los agentes deben transportar a los juerguistas borrachos que se quedaron dormidos en los parques de la ciudad. O lo que es peor, disuadir a los que se resisten, a los que se suben al camión e intentan doblar los tubos para parar el chorro de agua. La mayoría de la gente va pasando, pero hay los borrachos típicos que se ponen delante del vehículo, pues al final tienes que empujar a la gente
, cuenta Karlos Teres.
Algunos, incluso, se vuelven violentos. Dos hombres golpearon al conductor de un camión de la limpieza el 6 de julio, el primer día de las fiestas, y tuvo que ser hospitalizado por una fractura craneal y heridas en el rostro.
Mi compañero se asustó mucho porque me quedé tumbado, sin conocimiento, rodeado de un charco de sangre
, contó el conductor de 49 años, Saturnino Pérez Monge, al periódico local Diario de Navarra.
La gente se ha vuelto más agresiva con el paso de los años, lamenta Luis Hualde, a la cabeza del FCC Pamplona, la empresa que se ocupa desde hace 10 años de la limpiar las calles de la ciudad. Especialmente a ciertas horas, de madrugada. Yo lo asocio con el consumo de estupefacientes
, explica.
Las otras fiestas normalmente no duran más de un día o dos, lo que facilita la limpieza, pero en los sanfermines tenemos que encontrar la forma de compaginar 24 horas de fiesta con la limpieza
.
Aroma a limón
Se necesitan 250 agentes durante estas fiestas, lo que cuesta a la ciudad de Pamplona 400 mil euros, según un portavoz de la alcaldía.
Cada día es necesario retirar unas 60 toneladas de desechos durante la semana y 100 toneladas durante el fin de semana. Un equipo se dedica a limpiar los 30-40 puntos que hemos identificado como conflictivos, porque son lugares apartados de la fiesta donde hay rincones y la gente tiene la costumbre de orinar en la vía pública. Y huele mal
, añadió Hualde.
Los equipos utilizan un superpotente chorro de agua agua mezclada con desinfectante y desodorante que dejan un leve olor a limón. Para la tarea se utilizan 5 millones de litros de agua y mil 500 litros de productos de limpieza.