Aunque ningún directivo confirmó o desmintió si en Londres habrán turistas deportivos olímpicos como suele suceder en este tipo de certámenes, Ricardo Contreras, secretario general del COM, aseguró que en esta ocasión no asistirá nadie que no tenga una función específica, pero se refirió únicamente a los que aparecen en el libro oficial de la delegación tricolor y no a los invitados especiales, familias y amigos.

Un día después de que Jaime Cadaval había afirmado que irían 110 personas –jefatura, federativos, grupos multidisciplinarios, médicos y personal administrativo–, ni el propio jefe de misión, Carlos Padilla, presidente de la Comisión coordinadora para los Juegos Olímpicos de Londres, ni Carlos Cisneros, director técnico del Comité Olímpico Mexicano, coincidían con la cifra oficial.

De acuerdo con el libro de la delegación mexicana que se entregó ayer oficialmente aparecen con sus respectivas fotos 98 elementos, de los cuales 53 son técnicos, auxiliares y fisiatras, y 45 de pantalón largo entre funcionarios y empleados administrativos del COM y la Conade.

El tema de las acreditaciones provocó malestar en los directivos y más cuando se les preguntó si no llevarían turistas deportivos. Nadie respondió. Contreras, Padilla y Cadaval se abocaron a lo asentado en el libro de la delegación de 102 deportistas en el que no aparece el equipo de ecuestre y la nadadora Patricia Castañeda, por haberse integrado al final cuando el documento de 296 páginas ya estaba editado, según dijeron.

Ante la insistencia sobre las personas que tendrán gafetes especiales y aparecerán en la inscripción nominal que enviará el COM este domingo al comité organizador de los juegos, como si fueran parte del contigente tricolor –como se comprobó con documentos del organismo olímpico en Pekín 2008–, los directivos se quedaron callados e inclusive algunos de sus empleados comenzaron a silbar para dar por terminada la conferencia de prensa en el salón de ese recinto.

Antes, Contreras asumió el compromiso de los directivos y subrayó que la buena armonía, el trabajo en conjunto en este sexenio con la Conade y los deportistas nos hace pensar que habrán excelentes resultados.

El también dirigente del boxeo se aventuró a señalar que no esperaría cinco (medallas) sino más, y rechazó la palabra fracaso en caso de que no se gane nada.