San Cristóbal de las Casas, Chis., 10 de julio. Durante los años recientes el acceso a la salud reproductiva, sobre todo para los jóvenes y adolescentes, ha tenido algunas omisiones, estancamientos y retrocesos, entre ellos la cobertura de anticonceptivos, falta de visión integral en los contenidos sobre sexualidad en los programas escolares, carencia de campañas informativas hacia este sector y escasos resultados en la disminución del embarazo adolescente, aspectos que deben ser prioridad para la siguiente administración federal.

Lo anterior fue expuesto durante el taller denominado Atención Integral en Salud Reproductiva y Violencia Familiar en Comunidades Indígenas de Municipios de Alta Marginación. El encuentro fue organizado por el Fondo de Población de las Naciones Unidas (UNFPA) con motivo del Día Mundial de la Población, que se conmemora hoy, y cuyo tema es el acceso universal a la salud reproductiva.

Diego Palacios Jaramillo, representante del UNFPA en México indicó que se estima que en el país 24 por ciento de los jóvenes tiene una demanda insatisfecha en servicios de salud reproductiva; eso quiere decir que probablemente están tomando decisiones respecto de tener relaciones sexuales, pero no están siendo cubiertos, tampoco quieren embarazarse o buscan retrasar el embarazo, pero no están accediendo a la información, y esto debería ser parte de prioridades en materia de salud del próximo gobierno.

Susana Cerón, directora general del Centro Nacional de Equidad de Género y Salud Reproductiva de la Secretaría de Salud (Ssa), reconoció que entre las mujeres de 15 a 19 años, si bien se ha incrementado la cobertura del uso de anticonceptivos, al pasar de 14 por ciento a mediados de los años 70, a 45 por ciento a fines de la primera década del nuevo milenio, se evidencia que estas jóvenes no están teniendo la información oacceso a métodos anticonceptivos.

Sobre el embarazo adolescente dijo que hace 25 años había 92 nacimientos por cada mil jóvenes y para este año estimábamos que se reduciría a 58, pero desafortunadamente tenemos una tasa de fecundidad de 69 nacimientos por cada mil mujeres de entre 15 a 19 años, hemos tenido un retroceso, y es la muestra de la falta de efectividad de las políticas destinadas a los jóvenes.

Palacios Jaramillo precisó que aunque en los 12 años de gobiernos panistas el trabajo con la Ssa se ha mantenido y hemos hecho proyectos interesantes que dejan legado para el próximo gobierno, como son los servicios amigables (para jóvenes) y, en general el esfuerzo se mantuvo, pero en algunos rubros no se dio la misma importancia.

Entre los pendientes detalló el abastecimiento de anticonceptivos, sobre todo en el ámbito estatal y precisó que aunque la experiencia de México ha sido importante para hacer disponibles los métodos, creemos que en las entidades hay problemas; las compras descentralizadas no están asegurando que todos los métodos que deberían haber estén disponibles, y agregó que esto preocupa al UNFPA.

También comentó que la forma en que se imparte sexualidad en las escuelas se centra en la genitalidad y no en una sexualidad integral y responsable que aborde la relación de pareja y la prevención de la violencia. Refirió que con el cambio de administración federal se abre una ventana de oportunidad para revisar esos programas y profundizar y avanzar en la educación sexual en los colegios.

También se refirió a la ausencia de campañas de educación sexual enfocadas a adolescentes y celebró que recientemente el Consejo Nacional de Población lanzara una campaña en ese rumbo, luego de que se había dejado 12 a 15 años sin algo importante de comunicación de estos temas, se debe seguir con las campañas claras e innovadoras.

Sobre la mortalidad materna dijo que es en el único rubro donde no existe certeza de que México cumpla con el ODM de reducirla en 75 por ciento entre 1990 y 2015. Cerón indicó que estamos todavía muy lejos de alcanzar ese punto porque en promedio ocurren mil muertes maternas (por año) y la meta es llegar a 417.