La Secretaría de Economía no ha evaluado el impacto que tienen las importaciones, acusan
Miércoles 11 de julio de 2012, p. 42
Agricultores atribuyeron el alza de los precios de los alimentos a acciones especulativas de intermediarios y comercializadores, así como al incumplimiento de la Secretaría de Economía en hacer un seguimiento y una evaluación de los impactos de las importaciones en la economía nacional.
La Confederación Nacional Campesina y la Confederación Nacional de Productores Agrícolas de Maíz de México (CNPAMM) apuntaron que la sequía afectó la producción en 26 estados, así como las importaciones de maíz a Sudáfrica, con el pretexto de que esto bajaría el precio de la tortilla, pero sigue bloqueada la comercialización de medio millón de toneladas del grano de Sinaloa, 110 mil toneladas de Tamaulipas, 200 mil de Jalisco y 20 mil de Veracruz y Guerrero.
El arroz, expuso la CNC, se paga a 4 pesos por kilo al productor y los consumidores lo compran en 18 pesos; los productores de frijol reciben 12 pesos y en los centros comerciales se vende en 24; el kilo de carne se cotiza en 100 pesos el kilogramo, lo que equivale a casi dos salarios mínimos, por ejemplo. El gobierno trata de minimizar el problema de la carestía, agravado por el incremento del huevo y carne de pollo hasta en 40 por ciento debido a la presencia del virus de influenza aviar en dos municipios de Jalisco.
La situación se agrava por las alzas mensuales del diesel y las gasolinas, así como por la negativa del gobierno de soltar recursos extraordinarios para atender a los productores afectados por la sequía, asentó la organización.
Carlos Salazar Arriaga, presidente de la CNPAMM, explicó que a causa de las importaciones de maíz los precios internos del grano se redujeron. Las comercializadoras aducen que hay sobrante y pagan 3 mil 800 pesos por tonelada. El problema es que en 2007 se eliminaron aranceles a más de un centenar de productos con el argumento de la crisis de la tortilla, pero las autoridades no analizaron los efectos que causa a los agricultores y ahora nos quieren enfrentar con los consumidores, cuando especuladores y comercializadores encarecen los productos.
El Centro de Estudios de las Finanzas Públicas y Agri Tendencias y Servicios asentaron que continuará la volatilidad de los precios de los alimentos debido a factores climatológicos y por la reducida rentabilidad del campo ante el insuficiente apoyo tras la sequía. El precio de la carne se elevó por el despoblamiento de los hatos ganaderos, medida recomendada por la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación ante la intensa sequía.