Sin la crisis de 2009 se habrían generado más puestos de trabajo, expresa en Aguascalientes
Participa en la colocación de la primera piedra de la segunda planta de Nissan en la entidad
Martes 10 de julio de 2012, p. 19
Aguascalientes, Ags., 9 de julio. A menos de cinco meses de que concluya su gobierno, Felipe Calderón se acordó finalmente de su ofrecimiento hecho en campaña de convertirse en el presidente del empleo
. Presumió que durante su administración se han generado 2 millones de trabajos, pero sin mencionar que su promesa electoral fue crear un millón de plazas al año.
Al colocar la primera piedra de una nueva planta de Nissan mexicana, la segunda en la entidad, destacó que éste es el segundo periodo presidencial en que más empleos se han generado. Y si no hubiese sido por la crisis de 2009, por mucho, sería el mayor periodo de generación de empleos formales netos en la historia del país
.
Calderón –cuya gestión se ha centrado en la seguridad y la lucha contra el narcotráfico– recordó su oferta electoral de hace seis años. Dijo que durante junio se crearon 91 mil 500 nuevos empleos, con lo cual la cifra se eleva a casi 2 millones de puestos laborales en toda su administración.
Planta armadora
En el acto, directivos de la empresa automotriz japonesa informaron que en la nueva planta se invertirán 2 mil millones de dólares, se generarán 3 mil empleos directos en su primera etapa –otros 9 mil de manera indirecta– y tendrá una capacidad instalada para armar 175 mil automóviles por año. La planta estará lista para su operación a finales del próximo año.
El Presidente destacó que el país se ha convertido en una verdadera potencia en el ramo, pues durante los últimos años pasó del noveno al cuarto lugar como nación exportadora de autos.
Señaló que el país ha recibido abundantes
recursos de inversión de la mayoría de las firmas automotrices del mundo que tienen plantas armadoras en México. En los años recientes se han invertido o comprometido inversiones por un monto total de 12 mil millones de dólares. Pero ésta, la de Nissan, es la inversión más importante que tiene el país y, probablemente, en muchos países en este momento.
Para destacar aún más la magnitud de la inversión iniciada por el consorcio japonés, Calderón tomó un plumón, se dirigió a la mampara que tenía detrás y que servía de escenografía, para escribir ahí la cantidad de 27 mil millones de pesos –con todos sus ceros– y los 12 mil primeros empleos que se generarán, 9 mil de ellos en empresas proveedoras.
Destacó que este tipo de inversiones no son obra de la casualidad
. Empresas globales como Nissan eligen muy cuidadosamente el destino de sus inversiones, dijo, tras señalar que México ha hecho un enorme esfuerzo no sólo en el desarrollo de infraestructura, sino también en la formación de capital humano, donde hoy día se gradúan más de 115 mil ingenieros cada año.
Con esta alta calificación de la mano de obra, Calderón expresó su confianza de que, en algún momento, México pase de ser un país con la mejor manufactura, como ya lo es, a otro en que se diseñen nuevos productos.
Junto con la colocación de la primera piedra de la planta, Calderón, en compañía de los directivos de Nissan, pintó el ojo derecho al Daruma, cabeza de madera que en la tradición japonesa significa que pintar el primer ojo es el inicio de un proyecto, recordando a diario que se tiene que concluir. Una vez cumplido, debe pintarse el segundo.
Calderón dijo que como presidente le ha tocado pintar muchos ojos al Daruma, con proyectos que ha iniciado y concluido. Hay muchos primeros ojos de Daruma puestos en México, pero en general, el primer ojo que hemos colocado, el primer ojo que hemos decorado, es el de un México más justo, más seguro, un México más libre, más limpio, y más próspero. Y ese segundo ojo de Daruma tendrá que ser pintado con el esfuerzo de todos los mexicanos
, concluyó.