En el fraude colaboraron seudointelectuales y medios electrónicos, acusa
maquinación de añoscontra López Obrador
Domingo 8 de julio de 2012, p. 14
El eventual resultado de la elección presidencial del domingo pasado resulta de una maquinación de años contra Andrés Manuel López Obrador. José Agustín Ortiz Pinchetti, nombrado en su momento por López Obrador como integrante de su gabinete en la cartera de trabajo, consideró también que en el fraude colaboraron no sólo los medios de comunicación electrónica, sino un importante segmento de seudointelectuales que apuestan por el neoconservadurismo.
En entrevista, el abogado advirtió que de continuar el statu quo político, el país entrará en una dinámica de simulación democrática.
–El sistema de partidos políticos está siendo cuestionado desde hace dos décadas. ¿Morena (Movimiento de Regeneración Nacional) será la base de un nuevo partido de izquierda?
–Si, y creo que es inevitable, pues Morena está en toda la República muy bien estructurada. Mejoró mucho la promoción de voto por Andrés Manuel. Creo que muchos partidos, incluyendo uno tan grande como el PAN, están entrando en una crisis insalvable. Pero el PRI también, pues no se observó una explosión de jubilo entre los priístas, porque la gente no se siente aludida con sus propuestas y sintió que hubo una enorme manipulación.
–Frente a esta crisis de credibilidad partidista, ¿qué requiere la sociedad como nuevas alternativas?
–Requiere el surgimiento de dos grandes partidos, uno de centro izquierda y otro de derecha. Sin esa polaridad la democracia va a seguir dando tumbos. Hay una simulación democrática. Si las televisoras pueden definir quién es el presidente de la Republica se distorsiona el sistema democrático, porque se impone el interés del oligopolio mediático.
–Los intelectuales, en su mayoría, también se han sumado a la mediatización política.
–Hay una enorme complicidad de los intelectuales, escritores y locutores que se unieron a esta línea de la restauración. Creo que la competencia y la libertad son las condiciones para que prospere la democracia. Efectivamente, muchos intelectuales han traicionado la tarea de explorar y revelar la verdad. Pero no son verdaderos intelectuales.
Son gente que está en la penumbra del poder, en las nóminas recibiendo ventajas de los gobiernos locales o del federal, por eso ellos se han afiliado a la restauración del PRI. Por supuesto no son todos, porque hay otra franja critica.
–El tema es que dinero fácil se ha convertido en el factotum de la vida nacional– se le insistió
–Es un paradigma colectivo que se ha impuesto con el mal llamado neoliberalismo, yo creo que es neoconservadurismo, que se ha impuesto conseguir dinero a como de lugar. Lo mismo que el poder que se da a la tarea de saquear al país, de hacer grandes negocios. Eso no sólo abarca a los intelectuales, también al PRI y al PAN, ya lo vemos en personajes de los partidos de izquierda.
–¿Se configura el fraude electoral?
–Se preparó toda una maquinación para un fraude electoral. Se afectaron todos los principios constitucionales de las elecciones. Es una gran maquinación que abarcó los contratos del PRI con Televisa. Es una conspiración. En Estados Unidos ese delito es gravísimo...
–En México los voceros del régimen político de inmediato descalifican la tesis de la conspiración– se le interrumpió.
–Sí, no hay duda de que Vicente Fox, Demetrio Sodi, Peña Nieto y sus cómplices celebraron contratos privados con Televisa: éstos se descubrieron en el periódico de Londres, The Guardian, que develó que hubo tratos sucesivos para impedir que Andrés Manuel López Obrador creciera. Y esta conspiración abarcó varios años, traduciéndose en una maquinación fraudulenta que vino a desembocar en la elección pasada.
–Se habla de una reforma de fondo para cambiar la superestructura gubernamental, ¿así lo observa?
–Vamos a suponer que se diera la reforma política, la reforma de medios, lo van a volver a hacer –el fraude– no sólo con la clase intelectual –que juzgas tan severamente, pero con razón–, los monopolios que no quieren seguir pagando impuestos. Es un desastre, porque ellos quieren que sigamos así. La actitud de los grandes cotos de poder es premoderna, es semifeudal.
No obstante, hoy ha cambiado la conciencia pública, ese cambio es irreversible. ¿Cuál va a ser el resultado de lo que estamos sabiendo de las elecciones y el futuro, y esta nueva conciencia? Ese es el enigma.