Ante la falta de decisión del titular del Poder Ejecutivo federal por adoptar medidas para la protección de los periodistas, las secretarías de la Defensa Nacional y de Marina intentaron sin éxito realizar talleres en los que los integrantes de los medios de comunicación adquirieran conocimientos para protegerse al cubrir información relacionada con el combate al narcotráfico.

En marzo pasado, la Defensa Nacional llevó a cabo un taller de tres días en instalaciones militares en el que se ofrecieron a los reporteros detalles sobre la información y capacitación que reciben los soldados en materia de derechos humanos; la forma en que actúa la milicia en el combate al tráfico de drogas, además de prácticas de tiro y largas caminatas llevando los comunicadores el casco, chaleco antibalas y un arma larga para que conocieran de cerca lo que vive un soldado cuando está en un operativo.

La Secretaría de Marina también analizaba en aquel entonces la posibilidad de llevar a cabo un taller para periodistas, pero como la experiencia para la Defensa Nacional no fue la mejor (voceros de la dependencia se quejaron de que comentarios hechos durante el taller fueron mal interpretados y publicados), la Presidencia de la República dio la instrucción a la dependencia que encabeza el almirante Francisco Saynez Mendoza de cancelar dicha actividad.

De acuerdo con información obtenida, la intención de ambas dependencias era la de dotar a los reporteros de herramientas útiles para salir avantes en caso de que se vieran inmersos en algún operativo antidrogas o en un fuego cruzado.

En el caso de la Armada, puso en marcha, al inicio del operativo de seguridad en Veracruz a principios de este año, acciones para proteger a los periodistas que acompañaban a los marinos en acciones anticrimen. Ordenaron que llevaran consigo casco y chaleco antibalas como medida de protección; además de que eran transportados en vehículos blindados.

Trascendió que ante la falta de resultados y el desinterés del Ejecutivo federal, ambas dependencias optaron por proteger con los medios a su alcance a los periodistas cuando van a alguna actividad de dichas dependencias, pero nada más.

De esta forma, es común que cuando los reporteros que cubren las actividades castrenses se trasladan al interior del país o a una instalación militar o de la Armada, el transporte en el que se desplazan es escoltado por militares que portan armas de alto calibre.

Fuentes castrenses confirmaron que hasta el momento está parada la iniciativa para impartir un taller de este tipo, que sería de alguna manera similar al que se ofrece en otras partes del mundo para los reporteros de guerra.

De acuerdo con la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), de 2000 a la fecha han sido asesinados 82 comunicadores en México; extraoficialmente, hay medios que afirman que suman 93 los ejecutados y 16 los desaparecidos. En la inmensa mayoría de los casos, los comunicadores han tenido que enfrentar la violencia en su contra de manera individual, a pesar de que en el discurso se cuenta con un mecanismo de protección para los periodistas.