Los Cabos BCS, 19 de junio. Tras asegurar que la Cumbre de Líderes del G-20 fue un éxito, el presidente Felipe Calderón informó que los jefes de Estado y de gobierno reunidos aquí durante dos días acordaron el Plan de acción de Los Cabos para el crecimiento y el empleo, y asegurar el incremento de recursos financieros al Fondo Monetario Internacional (FMI) por un total de 450 mil millones de dólares, 20 mil millones más que los previstos.

En conferencia de prensa, donde informó de los detalles de los acuerdos alcanzados en la cumbre, el mandatario mexicano dijo que con las medidas adoptadas se enfrentan no sólo los riesgos más apremiantes de la crisis global, sino además se sientan las bases para una agenda de mediano y largo plazos. Es decir, son pasos firmes para la recuperación económica y plantea una agenda de futuro para el mundo.

En el Centro de Convenciones, donde se realizó la cumbre, señaló que otro acuerdo fue mantener los mercados abiertos al comercio, y extender hasta 2014 la cláusula stand still, que significa que los países miembros se abstengan de imponer nuevas medidas proteccionistas.

Señaló que los miembros del G-20 de la zona euro, tomarán todas las medidas de política necesarias para salvaguardar la integridad y estabilidad de la zona, y mejorar el funcionamiento de los mercados financieros. Sin embargo, aclaró que el G-20 es muy respetuoso de las decisiones que deberán tomar esas naciones.

Calderón se mostró optimista sobre el futuro de la economía mundial, y dijo que en esta reunión se mejoró la arquitectura financiera global, y calificó de fundamental para el futuro de la economía mundial la decisión de fortalecer al FMI. Señaló que con los 450 mil millones de dólares se ha más que duplicado la capacidad histórica de apoyo y de préstamo del fondo.

Es la mayor capitalización de su historia; se trata, pues, de la mayor ampliación de recursos que ha tenido esta institución fundamental para enfrentar los tiempos de crisis de la economía. Es un logro que implicó varios meses de complejas negociaciones bajo la coordinación de la Presidencia mexicana del G-20, en esta ocasión, dijo el mandatario.

La declaración final de la cumbre ratifica el compromiso de los países del G-20 para dar mayor poder de decisión a los países de desarrollo en el FMI, reformas que, dice el documento, resultan fundamentales para mejorar la legitimidad, relevancia y eficacia del Fondo.

En el mensaje a los medios de comunicación, el jefe del Ejecutivo federal hizo votos por que otras naciones, especialmente las desarrolladas, puedan sumarse, ahora, a este esfuerzo de capitalización del FMI y de otras instituciones financieras globales.

La presidencia mexicana del G20 se congratula así, de que se haya logrado sumar voluntades para adoptar una medida que dará mayor certidumbre y confianza a la economía global.

A nombre de los líderes participantes en la cumbre, Calderón también informó del acuerdo que se logró en la última sesión plenaria, poco antes de concluir dicho encuentro, en el que se decidió extender aún más, hasta el año 2014, el compromiso de los países miembros de abstenerse de instrumentar medidas proteccionistas, la llamada cláusula stand still, lo cual envía una clara señal de certidumbre a los mercados internacionales.

En un tono sereno y optimista sobre el futuro de la economía mundial, también se refirió a importantes avances que se alcanzaron para fortalecer el marco regulatorio, a fin de que se cuente con un sistema financiero más seguro, que contribuya al crecimiento sostenido, y con ello prevenir el surgimiento de nuevas crisis en el futuro.

Calderón señaló que se lograron avances en la creación de un nuevo marco institucional para el Consejo de Estabilidad Financiera, que es un órgano para promover el buen funcionamiento del sistema financiero global y coordinar el diseño e implantación de la agenda de reformas financieras.

En la cita de los logros alcanzados por esta cumbre, también se refirió al tema de la inclusión financiera, reconociendo que más de 2 mil 700 millones de personas en todo el mundo carecen de acceso a servicios financieros formales. Esto no es solo una injusticia, sino que también exacerba la desigualdad y obstaculiza el crecimiento de nuestras economías.

Calderón informó que México puso en la mesa el tema de seguridad alimentaria, en el que los países del G-20 también acordaron promover una mayor inversión pública y privada en agricultura, desarrollar las tecnologías e incrementar la productividad de este sector a nivel mundial.

México ha logrado que el G-20 no sólo atienda los problemas financieros y de coyuntura para las economías avanzadas, sino que también se aboque a una agenda integral, donde también propuso y acordó soluciones para ayudar a millones de personas que padecen la miseria y el hambre.

Finalmente, Calderón se refirió al acuerdo de que el medio ambiente sea una de las prioridades del G-20, a la par de los temas tradicionales de estabilidad económica y crisis.

A partir del 30 de noviembre del presente año México pasará la responsabilidad de la presidencia del G-20 a Rusia, por lo que la próxima cumbre se realizará en San Petesburgo en una fecha por decidir durante el otoño, según informó el presidente Putin en una conferencia de prensa posterior a la clausura.