Donetsk, 19 de junio. Inglaterra se clasificó a cuartos de final de la Eurocopa, como primera de grupo, tras vencer 1-0 a Ucrania con anotación de Wayne Rooney, en juego no exento de polémica arbitral por la invalidación de un gol al conjunto local.

El conjunto inglés se medirá con Italia en la siguiente ronda, mientras Francia, segunda del sector, jugará ante España. Ucrania, igual que la coanfitriona Polonia, firmó su eliminación.

Mucho se hablará del disparo del ucraniano Devic, al minuto 62, con John Terry sacando bajo los palos un balón que pareció haber rebasado la línea de meta.

En principio no habría cambiado el desenlace, pues Ucrania habría necesitado un tanto más y el empate habría añadido gran emoción a los minutos finales del encuentro.

Inglaterra planteó el partido inicialmente como si fuera un equipo pequeño. Como en el juego inaugural del grupo ante Francia, concedió toda la iniciativa al rival y apostó por el repliegue antes que ir al ataque. Ucrania lo aceptó encantando.

El conjunto anfitrión, apoyado por una grada enfebrecida, elevó la línea de presión muy arriba y se fue con valentía al ataque. Su actuación fue muy parecida a la ofrecida en los dos encuentros precedentes, aunque ayudada esta vez por el conjunto británico.

Es cierto que a Ucrania le faltaron más ocasiones importantes en la primera mitad, pero ofreció sensación de peligro en cada llegada. Echó de menos a Andrei Shevchenko, en el banquillo con molestias físicas.

El duelo ofreció algo diferente al minuto 27, cuando Rooney tuvo la primera ocasión para Inglaterra, al cabecear mal un balón cuando tenía todo a su favor. Esta acción pareció alertar a Ucrania y despertar a Inglaterra, que se dio cuenta de que su enemigo ofrecía facilidades.

Sin embargo, al conjunto de Roy Hodgson le faltó fe y un plan de ataque confiable.

Rooney aprovechó una falla del portero rival y marcó el gol inglésFoto Reuters

Los ucranianos siguieron acaparando el balón ante una Inglaterra agazapada y esperando lanzar su contrataque. No obstante, la primera parte se marchó sin más ocasiones. La emoción subía de temperatura.

Pero el partido no lo desequilibró ni una táctica ni un equipo. El desenlace llegó por un clamoroso error individual, en este caso del arquero ucraniano Pyatov.

Al minuto 48, Gerrard centró desde banda derecha, Pyatov no acertó a agarrar la pelota y Rooney, totalmente solo, cabeceó a 10 centímetros del arco. Inglaterra era primera y mandaba a Francia a la segunda posición del grupo.

Mientras, a Donetsk llegaban las noticias del gol de Zlatan Ibrahimovic ante Francia, lo que dejaba a Inglaterra como primera de grupo. El máximo premio.

Ucrania tuvo su gran oportunidad de meterse en el partido al minuto 62, con un remate de Devic que pareció entrar a la meta y apuradamente lo sacó John Terry bajo los palos; el silbante no pareció ver nada.

Al 69 entró Shevchenko ante el clamor de la hinchada ucraniana, que necesitaba algo en qué creer. Después Konoplyanka probó a Hart, quien repelió con reflejos, pero la suerte del partido estaba decidida.

Al término del partido, el técnico ucraniano, Oleg Blokhin, no ocultó su enojo: Fuimos mejores y tuvimos las mejores posibilidades. Los árbitros tienen la culpa, nos robaron un gol, un tanto que fue más que claro... Los ingleses tuvieron suerte.

De su lado, Steve Gerrard comentó: Para ser exitoso se necesita un poco de suerte. Y esperamos tener un poco más, declaró el capitán de los ingleses.

En tanto, el autor del gol, Rooney, anotó: Estoy contento por haber podido convertir después de tanto tiempo. Realmente merecimos esta victoria, y enseguida perfiló sus baterías hacia Italia, el siguiente rival: No creo que se encuentren felices por enfrentarnos.