Asegura funcionario que las medidas son las mismas desde 2007
Niega maltrato a viajantes, y de existir, son hechos aislados
, aclara
Lunes 18 de junio de 2012, p. 21
El gobierno de España analiza cambios para facilitar el ingreso de turistas mexicanos a su territorio, afirmó Alvaro Renedo, director de la Oficina Española de Turismo en México. En entrevista con La Jornada, lamentó que pudiera darse algún hecho aislado
en perjuicio de turistas mexicanos y asegura que los connacionales son especialmente apreciados por los españoles
.
–¿Se pretende desalentar el turismo con estas medidas?
–El gobierno español en ningún momento ha pretendido desalentar el turismo con las medidas de control de migración.
“Permítame circunscribir el problema en su justa medida: España es miembro del Espacio Schengen, de países adheridos al acuerdo de libre circulación de personas creado en 1985, cuyos objetivos fundamentales son la supresión de fronteras entre estos países y la libre circulación de personas y mercancías.
España, como país miembro, tiene obligación de cumplir con las regulaciones migratorias para cualquier extranjero que no pertenezca a este espacio. Estas medidas, que atienden enteramente a motivos de seguridad y control de fronteras, no pretenden disuadir al turista mexicano, el cual es especialmente querido y apreciado por los españoles.
–Especialistas aseguran que en el trato hay intolerancia e inclusive racismo.
–Los españoles nunca vamos a olvidar la generosidad con que México ha acogido históricamente a los españoles y las especiales relaciones que existen entre nuestros países.
“El Convenio de Schengen hace que España no tenga completa autonomía a la hora de fijar los requisitos de entrada para los extranjeros, pero somos conscientes del problema que se ha creado con México y, por ello, los gobiernos español y mexicano han acordado celebrar una reunión bilateral el próximo 22 de junio en Madrid para simplificar y facilitar los trámites de entrada a los turistas mexicanos a España, sin por ello comprometer la seguridad de los países Schengen.
Respecto de la opinión de los especialistas mexicanos que usted menciona, puedo asegurarle que no responden en absoluto a la realidad. El turista mexicano ha sido históricamente muy apreciado por los españoles. De hecho, España es el país europeo que con más frecuencia y mayor grado de satisfacción visitan los mexicanos.
–¿A qué obedece que las reglas para ingresar se apliquen con mayor rigor?
–Las regulaciones migratorias son las mismas desde 2007, y el criterio y rigor en la aplicación es el mismo desde que se implantaron; otra cosa diferente es que hasta ahora los medios de comunicación mexicanos no se habían hecho eco de las regulaciones migratorias y de sus consecuencias para entrar, no en España, sino a cualquier país de la zona Schengen.
“Los mexicanos no necesitan visado para entrar en España como turistas, si la estancia es menor a 90 días. Basta con contar con un pasaporte válido durante la totalidad del periodo de estancia, así como acreditar el justificante de vuelo de regreso, la reservación de hotel y la acreditación de medios económicos –64 euros diarios por persona– o, en su caso, viajar acompañados de una carta de invitación. Sin embargo, se estudia aplicar un procedimiento más ágil, simple y económico para la obtención de la carta invitación.
–¿Se aplican esas medidas con más rigor a turistas mexicanos o al turismo mochilero
?
–En absoluto existe, ni ha existido, la intención de aplicar las regulaciones migratorias con mayor rigor dependiendo del origen, sexo, raza, orientación sexual o poder económico del turista. España es un país tolerante y contamos con leyes de protección a inmigrantes muy superiores al resto de países de la OCDE.
–El maltrato a turistas, ¿es producto de hechos aislados o se trata de una medida gubernamental?
–El maltrato que usted supone y que desde esta embajada desconocemos, en el caso hipotético de haberse producido, se habría debido a casos muy aislados, dado que nuestros cuerpos de seguridad del Estado están sometidos a una estricta regulación que garantiza al más alto nivel la protección de los derechos humanos. En ningún momento España ha maltratado, ni va a maltratar a ningún turista, y mucho menos mexicano.
Por supuesto, ha podido haber algún hecho aislado, o alguna equivocación en el trámite de migración en las fronteras españolas. Si ello ha sido así, y lo lamentaríamos profundamente, habría sido la excepción que confirma la regla del buen trato general que España otorga a sus turistas y visitantes. Y desde luego, vamos a hacer todo lo posible para que esos supuestos casos aislados no se vuelvan a repetir.