Los Cabos BCS, 17 de junio. El potencial de crecimiento de la sociedad se empobrece si las personas con iniciativa no tienen capacidad de ahorro y de acceso a servicios financieros, aseguró el presidente Felipe Calderón Hinojosa, quien afirmó que para el gobierno mexicano la inclusión financiera es una de las prioridades a discutir en la cumbre del Grupo de los 20 (G-20), que inicia sus trabajos este lunes.

La reunión cumbre del G-20 discutirá temas de coyuntura, de manera destacada los relacionados con la crisis europea, pero en la cita habrá espacio para lograr una visión de largo plazo que permita trazar la ruta del desarrollo y, para que ello ocurra, los jefes de Estado y de gobierno, así como los dirigentes de instituciones multilaterales que se reúnen aquí, debemos tener entre nuestras prioridades los temas de justicia económica, y qué mejor tema que la inclusión financiera, afirmó Calderón.

El mandatario mexicano, junto con sus pares de Indonesia, Susilo Bambang Yudhoyono, y de Chile, Sebastián Piñera, participaron en un foro en el que firmaron los compromisos de un programa de aprendizaje recíproco de inclusión financiera que, confió Calderón, será suscrito en esta cumbre por mandatarios de las naciones que pertenecen al G-20, un conjunto de naciones avanzadas y en desarrollo que contribuyen con 85 por ciento del producto interno bruto mundial.

La iniciativa de aprendizaje recíproco de inclusión financiera forma parte de un compromiso político por ampliar las políticas de acceso a los servicios bancarios a población excluida del sistema financiero formal, y como parte de esa iniciativa se busca facilitar el intercambio de experiencias entre distintos países.

Entre 65 y 70 de cada 100 pequeñas y medianas empresas del mundo no tienen acceso a los servicios financieros formales, aseguró Calderón. Ello significa, dijo, que millones de personas están al margen de servicios claves de la economía formal, que no pueden acceder a un crédito para poner un negocio. Significa, abundó, que tienen que acudir a intermediarios informales, “a coyotes”, para obtener recursos a un costo elevado.

“Cuando esas personas tienen que recurrir a un préstamo en canales informales lo hacen en condiciones más onerosas que cualquier otro miembro de la sociedad; tiene que acudir al usurero, al coyote y pagar tasas mucho más altas que cualquier empresa con altos rendimientos y eso exacerba desigualdades y genera obstáculos a la eficiencia de las economías”, abundó.