La agenda que se analizará en la cumbre del G-20, a realizarse en Los Cabos, en torno a seguridad alimentaria es tibia y poco ambiciosa, lamentó Timothy A. Wise, director del Programa de Investigación y Políticas del Instituto de Medio Ambiente y Desarrollo Global, de la Universidad Tufts de Estados Unidos.

Entrevistado durante el segundo día de actividades del seminario internacional Nuevos paradigmas y políticas públicas para la agricultura y sistemas alimentarios globales, el experto en agrocombustibles indicó:

Son cuatro las políticas claves para enfrentar la situación alimentaria como regular la especulación financiera ante la cual no han hecho nada los países ricos; controlar la volatilidad por el uso de reservas alimentarias; detener la expansión de los agrocombustibles y apoyar a las políticas de rescate de la capacidad para producir alimentos, para no depender de las importaciones. Así como establecer políticas de protección a los productores.

En cuanto al hecho de que las propuestas de las organizaciones civiles han sido excluidas de la discusión de la cumbre, precisó que aunque el gobierno de México ha abierto audiencias a la sociedad civil, no hace mucho caso de los planteamientos, y se ve que en cuanto a la seguridad alimentaria ya han tomado sus decisiones, las cuales excluyen las acciones más importantes para enfrentar la problemática.

Sobre los agrocombustibles, Wise remarcó que la canalización de maíz para la producción de etanol es una de las situaciones que más contribuyen al alza de precios.