Entrenan en Járkov para enfrentar una final
ante Alemania
Lunes 11 de junio de 2012, p. 6
Járkov/Cracovia, 10 de junio. El día después de la derrota la incredulidad, la frustración y la decepción reinaron hoy en la concentración holandesa. Con las cabezas gachas y los rostros cansados, los astros del futbol holandés entrenaron en el estadio Reymana, de Cracovia.
Los vicecampeones mundiales llegaron a las dos de la madrugada a su hotel, procedentes de Járkov. En el equipaje traían la dura derrota por 1-0 ante Dinamarca en el partido inicial y la amarga conclusión de que el miércoles, contra Alemania, prácticamente estarán ante una final
para seguir vivos en la Eurocopa.
Está claro que un día después de un partido así no vamos a bailar una polonesa
, dijo el técnico Bert van Marwijk a la cadena televisiva holandesa NOS. Pero no se trata de un ambiente de abatimiento, aclaró. Es la calma antes de la tormenta. Todos saben que contra Alemania se juega todo
. Otra derrota podría significar el fin, si Dinamarca suma puntos previamente ante Portugal.
A pesar del desperdiciado primer partido, Van Marwijk no quiere cambiar nada de su táctica. El miércoles también jugaremos de forma ofensiva, aunque deberemos atacar de manera controlada. No podemos dejar pasar la oportunidad
, dijo el entrenador, de 60 años.
Los jugadores no quisieron hablar del tropiezo de la primera fecha. Al menos no con los medios. Entre ellos, en cambio, hubo un vivo intercambio de opiniones. Van Marwijk habló en privado con varios de sus pupilos. Una y otra vez alzaba y bajaba los hombros en señal de desconcierto: seguía sin tener claro cómo se perdió el partido ante los daneses, a pesar de la clara superioridad de los naranjas.
Mientras los suplentes Joris Mathijsen y Klaas-Jan Huntelaar jugaban un partido de cierre de entrenamiento, el capitán Mark van Bommel, Wesley Sneijder y Arjen Robben discutían intensamente al borde del campo sobre el triste inicio de la Eurocopa. Tampoco ellos parecen haber hallado respuestas.
Van Marwijk, por su parte, se negó a analizar cualquier posibilidad de una precoz eliminación. Me niego a hablar ahora de eliminación. No tiene sentido pensar ahora en negativo
, subrayó, tras su partido número 50 como entrenador de Holanda.
Cae confianza de los aficionados
Allá en la patria, sin embargo, la confianza parece haberse evaporado. Si antes del torneo casi 70 por ciento de los encuestados en un sondeo del diario De Telegraaf hablaban de un título, ahora 80 por ciento de los alrededor de 21 mil entrevistados se preparan para una eliminación de su equipo en la primera ronda.
Para los jugadores, hasta ahora convencidos de su superioridad, y los miles de hinchas que se trasladaron hasta Járkov, la idea de una eliminación en una etapa tan temprana es terrible. Para el entrenador danés Morten Olsen, en cambio, es una posibilidad, al igual que el avance de los suyos a cuartos de final. Ahora tenemos una buena base de partida. Si volvemos a alcanzar nuestro mejor nivel y tenemos algo de suerte, también podemos vencer a Portugal
, dijo Olsen, de 62 años.
Quizás nadie simbolice lo que ocurre con Holanda como Arjen Robben, quien está pasando una de las peores temporadas de su carrera profesional.
Robben lanzó un balón al poste en la derrota ante Dinamarca, y no supo resolver algunas aproximaciones al área rival, que parecían ventajosas.
El jugador del Bayern Munich vive una pesadilla, que lo ha sumido al mismo tiempo en falta de confianza. Nada parece sonreírle esta temporada. Todavía le quedan partidos en la Eurocopa para resarcirse, empezando por los dos últimos del grupo de la muerte
, contra Alemamia y Portugal.
Si Holanda fuera eliminado en la primera fase, la leyenda negra del mal año de Robben crecería.