Berlín, 7 de junio. La canciller alemana, Angela Merkel, destacó este jueves la disposición de su país a usar todos los instrumentos a la mano para mantener la estabilidad en la zona euro, avivando las expectativas de que España decida pronto buscar ayuda para sus endeudados bancos.

Después de reunirse con el primer ministro británico, David Cameron –quien pidió acciones urgentes para abordar la crisis de deuda–, Merkel dijo que Alemania está lista para adoptar las medidas necesarias.

Es importante volver a destacar que hemos creado los instrumentos para apoyo en la zona euro y que Alemania está lista para usar estos instrumentos cuando sea necesario, declaró Merkel, en referencia al fondo temporal de rescate, el Fondo Europeo de Estabilidad Financiera (FEEF) y a su sucesor permanente, el Mecanismo Europeo de Estabilidad (Mede).

Esta es una clara expresión de nuestra voluntad política de mantener estable la zona euro, con el propósito de que pueda realizar su contribución al crecimiento económico mundial, señaló.

Si España decide en los próximos días o semanas pedir ayuda para recapitalizar a sus bancos, afectados por deudas tóxicas del sector inmobiliario y préstamos de bajo rendimiento, se espera que solicite 440 mil millones de euros del FEEF o posiblemente del Mede, que debería empezar a operar el mes próximo.

Por otro lado, Merkel abogó por reforzar la unión política europea, una propuesta de largo plazo que frustra los reclamos de muchos socios por soluciones urgentes a la crisis de la deuda, en momentos en que España se tambalea.

En conferencia conjunta con el jefe del gobierno británico, David Cameron, Merkel, férrea partidaria de los ajustes presupuestarios, admitió que el pacto fiscal no es la panacea para reactivar las maltrechas economías europeas.

Necesitamos más Europa, una unión presupuestaria y, antes que nada, una unión política. Debemos, paso a paso, transferir competencias a Europa, sobre una base voluntaria, dijo Merkel en declaraciones a la televisión.

Ese camino abre la puerta a una Europa a dos velocidades. No debemos quedarnos inmóviles porque uno u otro no quiere todavía seguir esa orientación, subrayó la jefa de gobierno de la principal potencia económica del continente.

Merkel, además, empañó las expectativas de quienes esperan que la cumbre de la Unión Europea de finales de junio, en Bruselas constituya una etapa decisiva en la solución de la crisis de deuda en la unión monetaria, que ya obligó al rescate de Portugal, Irlanda y Grecia y que ahora tiene en la cuerda floja a España.

No hay ninguna cumbre capaz de solucionarlo todo de golpe, aclaró Merkel, una declaración que, sin duda, será de poco consuelo para España.