El tema de la necesidad de crear una secretaría de cultura volvió a salir a la luz, ahora en el contexto del ciclo Los grandes problemas nacionales: diálogos por la regeneración de México, que concluyó ayer, luego de realizarse desde el 6 de marzo pasado en el Club de Periodistas.

Organizado por el Movimiento Regeneración Nacional (Morena), en la primera de las dos mesas sobre cultura participaron el ex diputado Alfonso Suárez del Real, el antropólogo y jurista Bolfy Cottom y el director de cine Víctor Ugalde, moderados por Francisco Pérez Arce.

Cottom dijo que la discusión de crear una secretaría de cultura viene desde la época de José Vasconcelos y parte de la consideración de ver o no a la cultura y la educación como un binomio.

Recordó que él siempre se ha opuesto a la creación de una secretaría de cultura porque, entre otros argumentos, implicaría la creación de un nuevo sector, la negociación de un contrato colectivo de trabajo y, por lo mismo, el riesgo de perder derechos laborales.

Además, se duplicarían funciones de la Secretaría de Educación Pública (SEP) con las de la nueva secretaría de cultura, pues ésta también tendría que ver con el sistema de enseñanza. Otros riesgos serían caer en un estatismo cultural y la posibilidad de censura.

Con un nuevo sector también tendrían que modificarse muchas leyes, dijo. Existe un caudal de intereses que, de abrirse esas reformulaciones, sería oportunidad para los consorcios económicos.

Destacó que ante la visión del binomio cultura-educación, ahora el gobierno federal promueve el de cultura-turismo, por recomendación de organismos financieros internacionales. El patrimonio cultural se vende, pero cuál es el beneficio para el pueblo, se preguntó.

Cottom advirtió además sobre la apropiación por empresas trasnacionales de conocimientos de la medicina tradicional o de técnicas y diseños de textiles.

Jaime Torres Bodet decía que en la construcción de un edificio se debe comenzar por los cimientos y luego seguir con los adornos, ilustró.

Sin embargo, dijo que no se encuentra cerrado a la discusión, pues en ambas posiciones existen argumentos. Se debe sentar a todos los sectores para realizar un análisis y evaluación profunda y avanzar con cautela, propuso.

Incluso asumió que no descarta una secretaría de cultura, siempre y cuando se realice como un proceso, con objetivos claros, pues en el fondo lo que se discute es un proyecto de nación.

Cottom mencionó varios desafíos: reconstruir el diálogo sobre el papel del Estado mexicano; rehacer la relación del binomio cultura-educación, del cual se ha desentendido la SEP; debatir y definir cómo debe ser el órgano del subsector cultura de esa secretaría, pues el Consejo Nacional para la Cultura y las Artes (CNCA) está agotado y ahora es terreno de disputas internas.

Y también: resolver los desafíos de los compromisos de México derivados de diversos tratados internacionales, pero sin copiar modelos y considerando que, si bien deben cumplirse, tienen que estar ajustados a la Constitución.

Suárez del Real coincidió con Cottom en cuanto al deterioro del CNCA y la necesidad de reconstruir la relación cultura-educación desde una óptica nacional, no desde el avasallamiento.

Urge consolidar el reconocimiento de la cultura como un derecho humano y fundamental del pueblo mexicano, fijado en las reformas constitucionales de 2009 y 2011, dijo el ex legislador.

Mencionó el planteamiento de Elena Poniatowska de que la cultura es un instrumento de defensa nacional, integrada a la vida cotidiana, y que es la influencia definitiva en el desarrollo humano, así como el mejor cimiento para recuperar la paz del país.