En la Permanente, el PRI se deslinda del ex mandatario
Jueves 24 de mayo de 2012, p. 12
La sesión de ayer de la Comisión Permanente del Congreso fue escenario de reproches y críticas mutuas entre legisladores de PRI y PAN, quienes durante tres horas se acusaron de corrupción.
Los priístas se vieron obligados a deslindarse del caso Tomás Yarrington, ex gobernador de Tamaulipas, quien enfrenta una demanda civil en Estados Unidos por la probable compra de inmuebles en Texas con recursos de procedencia ilícita.
Los diputados del PAN pusieron el tema a debate, molestos porque los priístas comenzaron a hacer tiempo para que no se discutiera su propuesta de que la Procuraduría General de la República (PGR) investigue si los viajes y gastos suntuosos de la hija del dirigente petrolero Carlos Romero Deschamps se sufragaron con recursos públicos.
Los legisladores priístas César Augusto Santiago y Humberto Benítez Treviño se lanzaron contra el presidente Felipe Calderón y lo responsabilizaron de faltar, calumniar y difamar al Congreso por no haber aprobado la reforma que propuso al Código Federal de Procedimientos Penales, pero la mayor parte del debate se centró en Yarrington.
En Estados Unidos se iniciará un proceso para demostrar que cuando fue gobernador, Yarrington participó con el crimen organizado
, sostuvo el diputado Gustavo González Hernández, del PAN. Agregó que hay otras fuentes, también muy valiosas, que nos permitirán saber el grado de corrupción en el que están involucrados muchos de funcionarios notables
del PRI.
Así que, van a tener que poner sus barbas a remojar
otros priístas, como Romero Deschamps y Ulises Ruiz, agregó.
De inmediato respondió César Augusto Santiago. Le dijo que si no le daba vergüenza hablar de corrupción, cuando el PAN nada ha hecho con el funcionario de la Comisión Federal de Electricidad acusado de prácticas corruptas; con el alcalde con licencia de Monterrey, Fernando Larrazábal, o con el hijo de Marta Sahagún, involucrado también en problemas con la justicia de Estados Unidos.
Sostuvo que no es justo linchar a un ser humano, que ni siquiera ha sido juzgado, como se pretende con Yarrington.
Otros diputados del PRI lo secundaron. Felipe Solís Acero leyó un despacho de Notimex en el que se señala que el ex gobernador de Tamaulipas no es investigado por los fiscales federales.
Los senadores del PRI no participaron en el debate e incluso, cuando comenzó a discutirse el caso Yarrington, el coordinador Manlio Fabio Beltrones se retiró de la sesión.
Como hicieron la semana pasada, los integrantes de la bancada del PRI en San Lázaro recurrieron a tácticas dilatorias. Primero objetaron el orden del día y luego comenzaron a formular una pregunta tras otra a César Augusto Santiago, hasta para felicitarlo, como hizo Rogelio Cerda. Con ello lograron que pudiera hablar más de 40 minutos.
Los panistas González y Vladimir Ramos reclamaron la triquiñuela. El primero recalcó que el candidato presidencial del PRI, Enrique Peña Nieto, superó en corrupción en el estado de México a su tío Arturo Montiel.
El diputado Víctor Manuel Castro, del PRD, dijo que reconocía un empate entre ambos en cuanto a la corrupción, pero el tema no es ver quién es más corrupto, porque ese tema el pueblo de México lo conoce muy bien
.
No fue posible aprobar un pronunciamiento de la Permanente, como planteó el diputado Jaime Cárdenas, del PT, aunque los priístas no escatimaron argumentos contra Calderón. Rogelio Cerda dijo que el jefe del Ejecutivo actuó de forma irreflexiva, imprudente, injusta, atropellada y despótica
.