Miércoles 23 de mayo de 2012, p. 26
Santiago. Las autoridades chilenas decretaron alerta sanitaria en una amplia zona de la región de Atacama y el cierre temporal de una planta de cerdos, a fin de evitar que miles de personas del desierto enfrenten una catástrofe sanitaria mayor
luego que unos 500 mil cerdos habían sido abandonados a su suerte hace tres días cuando los pobladores protestaban por los malos olores expelidos por los animales. El conflicto surgió el jueves pasado, cuando los habitantes de Freirina, en Atacama, a unos 800 kilómetros al norte de Santiago, cortaron los caminos de acceso a la planta Agrosuper ante el incremento del mal olor, y que derivó en enfrentamientos con la policía y saldo de 23 detenidos y dos vehículos policiales quemados. El ministro de Salud, Jaime Mañalich, logró un acuerdo ayer con los pobladores, lo que permitió el desbloqueo de los caminos y la entrada a la planta de las autoridades y los operarios, que comenzaron a alimentar a los cerdos, aunque muchos ya habían muerto. La empresa Agrosuper admitió que problemas en el sistema de aireado de las dependencias incrementaron los fetidez. La empresa no ha sido responsable con el medio ambiente y la ciudadanía
, aseveró el ministro Mañalich a los medios.