Los riesgos proceden principalmente del exterior por las crisis de deudas, dice análisis
La presión inflacionaria en el país va a ser moderada y se podrán usar los tipos de interés para estimular la demanda interna, considera Gurría
Arremete contra los subsidios a la energía
Miércoles 23 de mayo de 2012, p. 28
París, 22 de mayo. La economía mexicana crecerá este año 3.6 por ciento –por encima del promedio de la economía mundial– y en 2013 cerca de 3.8 por ciento, gracias a la mejora de las exportaciones y a la recuperación de las condiciones internas, prevé la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), en su informe semestral.
La organización con sede en París, y dirigida por José Ángel Gurría, advierte que los riesgos para el crecimiento de la economía mexicana proceden principalmente del exterior, debido a la incertidumbre que pesa sobre la crisis de las deudas soberanas en Europa y el riesgo de que la recuperación de Estados Unidos se descarrile debido, por ejemplo, a un brusco endurecimiento fiscal.
La OCDE señala que como la presión inflacionaria en el país va a ser moderada, el Banco de México tiene margen de maniobra para utilizar los tipos de interés para estimular la demanda interna. Hay campo para una reducción mayor de los tipos de interés para estimular la demanda
, dicen los economistas de la OCDE, que anticipan un crecimiento de los países de la organización de 1.8 por ciento este año y de 2.4 por ciento para el próximo.
La crisis de la zona euro, que se ha agudizado recientemente, sigue representando la principal fuente de riesgo para la economía mundial
, advierte el organismo, encabezado por el secretario de Hacienda en la presidencia de Ernesto Zedillo.
En el caso de México, las expectativas de una inflación controlada y la acumulación de reservas de divisas dejan considerable campo para políticas de respuesta
, apunta el informe.
Los planes del gobierno para equilibrar el presupuesto de 2013 no deberían socavar la recuperación, dada la mejora de las condiciones, dicen los economistas.
Sin embargo, una vez más la organización arremete contra los subsidios a la energía y recomienda que ese dinero se gaste en inversiones o en programas de lucha contra la pobreza
. Otra preocupación es la poca eficiencia de Petróleos Mexicanos, que limita su capacidad para aumentar la producción de crudo.
Después del debilitamiento observado en el segundo semestre del año pasado, el producto interno bruto (PIB) de México creció 5.5 por ciento en 2010 y 4 por ciento en 2011. La producción industrial y las exportaciones han mejorado este año gracias a la recuperación de su principal socio comercial, Estados Unidos.
Por otra parte, señala que los flujos de capital han contribuido al crecimiento y a la política macroeconómica sólida que llevan a cabo las autoridades monetarias, lo cual, sumado a una baja inflación, que se sitúa dentro de los objetivos del banco central de 3 por ciento, sirve de imán para el capital extranjero. No obstante, recomienda que se vigilen de cerca los flujos de capital, ya que pueden estar en parte motivados por consideraciones de corto plazo y por tanto ocasionar reveses abruptos
.
Europa, el mayor riesgo para la economía mundial
El agravamiento de la crisis de la eurozona constituye el mayor riesgo para la reactivación de la economía mundial, en momentos en que Estados Unidos y Japón tienen crecimientos aún modestos, advirtió en su análisis semestral la OCDE.
La entidad mantiene su previsión de un crecimiento mundial de 3.4 por ciento en 2012, aunque rebajó una décima, a 0.1 por ciento, su proyección para la eurozona, a la que instó a flexibilizar su política monetaria y adoptar medidas a favor de la reactivación.
La OCDE, formada por 34 países (en su gran mayoría industrializados), prevé que el PIB mundial crecerá 4.2 por ciento en 2013, y que el de la eurozona (formada por 17 países) será de 0.9 por ciento, si logra contener la crisis de deuda. Algo que no parece ganado de antemano.
La recesión, el desempleo creciente y las dificultades sociales pueden provocar un contagio político y una reacción adversa de los mercados
, golpeando incluso a países externos a la unión monetaria. El desempleo promedio de la eurozona será de 10.8 por ciento este año y de 11.1 por ciento en 2013, prevé el organismo.