Andrés Manuel López Obrador, candidato presidencial de la coalición Movimiento Progresista, resaltó que tras el debate se siente más fortalecido y no cambiará su estrategia de campaña.

Resaltó que cumplió con el propósito de informar sobre lo que está en juego en el actual proceso electoral y acerca de quién es el priísta Enrique Peña Nieto, pese al rígido y acartonado formato del debate. No quiso opinar sobre la controversia desatada por el atuendo de la ex playmate Julia Orayen.

En el contexto del triunfo del socialista François Hollande en Francia, indicó en su conferencia de prensa matutina: En todo el mundo se está pensando que haya cambios hacia la izquierda; lo de Francia es muy buena noticia.

–¿México debe seguir los pasos de Francia? –se le preguntó.

–Sí, vamos a ganar la Presidencia –respondió.

López Obrador manifestó que si antes del encuentro con sus adversarios por la Presidencia íbamos bien, ahora nos va a ir mejor con este impulso, basado en los resultados de una encuesta de María de las Heras, que lo ubicó en primer lugar tras el debate.

El abanderado de la izquierda dijo que no se centró en ataques, sino en describir la realidad, ante la falta de información que prevalece en México. Reiteró que quienes mandan en el país y algunos medios de comunicación, en especial Televisa, buscan imponer al abanderado del PRI como presidente, a través de la manipulación, el engaño, la publicidad y la mercadotecnia.

Lo quieren para seguir haciendo jugosos negocios al amparo del poder público; para que se mantenga este régimen de corrupción, de injusticias, de privilegios; para seguir privatizando y porque ambicionan quedarse con Pemex.

Resaltó que a diferencia del abanderado tricolor, él supo hacer frente cuando Peña Nieto intentó relacionarlo con René Bejarano y Gustavo Ponce. No tardó la respuesta y ya, se quedó calladito, afirmó.

Recordó que aún falta para cumplir con su objetivo de informar sobre el ex gobernador del estado de México, y confió en que para el segundo debate, el 10 de junio, haya más tiempo para exponer.

López Obrador descartó que se hubiera puesto de acuerdo con la panista Josefina Vázquez Mota para atacar al priísta.