La medida provoca la dimisión de Rodrigo Rato, presidente de Bankia y ex director del FMI
Rajoy consideró inminente la medida, pese a ofrecer en campaña no dar dinero público a entidades financieras
Martes 8 de mayo de 2012, p. 24
Madrid, 7 de mayo. Bankia, uno de los cincos principales bancos españoles, será rescatado
con un fondo público que en su primera fase será de 7 mil millones de euros y se aprobará el próximo viernes en la reunión del Consejo de Ministros del Ejecutivo español, del conservador Mariano Rajoy. La medida, que pone en evidencia la delicada situación del sistema bancario español, provocó la dimisión irrevocable del presidente de la entidad financiera, Rodrigo Rato, quien fue director del Fondo Monetario Internacional (FMI) de los años previos a la crisis, hasta 2007.
El sistema financiero español tiene un problema estructural de liquidez y de estar contaminado
con productos tóxicos
procedentes de la crisis de los sectores de la construcción e inmobiliario. Se trata de créditos personales y empresariales sin cumplir, que en su día se otorgaron sin garantías en plena fiebre de la burbuja inmobiliaria. Uno de los bancos con más productos tóxicos
es Bankia –antes Caja Madrid–, que además tiene participación pública de la Comunidad de Madrid, una de las instituciones públicas más relacionadas con la corrupción político-empresarial.
Por la mañana, en una entrevista radiofónica, Mariano Rajoy reconoció que el paquete de rescate
a la banca privada era inminente, a pesar de que él se comprometió en campaña a no entregar ni un euro de dinero público a las entidades financieras. Mi última intención sería inyectar o prestar dinero público, pero si es necesario lo haré igual que lo han hecho otros gobiernos
, al tiempo que confirmó que se aprobarán importantes medidas
relacionadas con el sistema bancario este viernes.
La afirmación del mandatario se produjo cuando ya se había filtrado a varios medios de comunicación el llamado Plan de Guindos, en alusión al ministro de Economía, Luis de Guindos, con el que se pretende sanear
el sistema bancario, pero que se iniciaría con el rescate público de Bankia con un fondo de más de 7 mil millones de euros. El gobierno de Rajoy aprobó los recortes más duros en los servicios públicos en la historia de la joven democracia española, que sólo en las áreas de sanidad y educación ha superado los 20 mil millones de euros.
Según el citado Plan de Guindos, el Banco de España y el gobierno actuarían en conjunto mediante un decreto de reforma financiera que autorizará la inyección de dinero público en bonos convertibles en acciones, que después tendrá que pagar la entidad rescatada a una tasa de interés de mercado.
Esta medida se produce una semana después de que Standard and Poor’s rebajó la calificación de prácticamente todos los bancos españoles, desde Santander, Banesto, BBVA, Banco Sabadell, Ibercaja, Kutxabank, Banca Cívica, Bankinter, Barclays hasta la Confederación Española de Cajas de Ahorros.
La confirmación de que el rescate de Bankia se autorizará finalmente este viernes fue la dimisión irrevocable de Rodrigo Rato, ex director del FMI y ex vicepresidente económico del gobierno de José María Aznar. Rato situó su renuncia en la compleja situación de la entidad y del conjunto del sector en un momento crítico para el país.
Pese a las condiciones adversas del mercado y las dificultades añadidas de todo proceso de fusión, en 2011 Bankia conseguió unos beneficios de 309 millones de euros, además de haber adelantado más de mil 200 millones de euros de provisiones; Bankia ha restructurado su red de oficinas con el cierre de 800 sucursales. Ha realizado un ajuste de plantilla equivalente a 25 por ciento de todo el sector financiero español
, afirmó en su comunicado de dimisión.
Rato propuso a José Goirigolzarri como sucesor, al ser el actual consejero de la entidad y ex consejero delegado del BBVA.