Álvaro Dávila, presidente del Morelia, reconoció que la situación de violencia suscitada en el estacionamiento del estadio Morelos –tras la goleada 4-1 que los Tigres asestaron a Monarcas– se nos salió de las manos. No obstante, resaltó que el equipo universitario se fue intacto: tan es así que no hay protesta de ellos.

El directivo reconoció que un sector del público reaccionó con violencia y se encaminó al acceso principal, “iban prácticamente a reclamarle al equipo local, pero también ahí está el vestidor del visitante y sí hubo algo, agresiones a vehículos... Hasta el momento no he recibido ningún mensaje de la Federación (Mexicana de Futbol).

Los hechos fueron lamentables, nosotros tratamos de tener un aparato de seguridad competente, con 50 elementos de seguridad privada, pero básicamente están para hacer cateos y controlar las entradas. Donde ocurrieron los hechos nada más había 10, 15 uniformados, y cuando se pudieron concentrar en un punto los demás, ya había desperfectos, explicó.

En la trifulca resultaron con daños vehículos de Tv Azteca y de Televisa, así como una motocicleta incendiada. Vía telefónica, Dávila agregó: Tenemos cámaras de video colocadas en diversas áreas, se detuvo a algunos de los infractores, pero como eran menores de edad, a las dos horas ya estaban libres.