Berlín, 7 de mayo. Un nuevo muro divide estos días el centro de Berlín, aunque la edificación nada tiene que ver con la guerra fría, sino con el abismo existente entre ricos y pobres.

El Peace Wall o Muro de la Paz es una instalación artística de 12 metros de ancho y cinco de largo emplazada en la emblemática calle Friedrichstraße, justo en el punto en el que durante años se alzó el temido puesto de control fronterizo Checkpoint Charlie.

Se trata de una propuesta de la artista bosnia Nada Prlja, que consiste es una construcción negra con una de las caras cubierta de chapa y se expone en el contexto de la Bienal de Berlín, cuyas actividades concluirán el 1º de julio.

El nuevo muro es en realidad un mensaje político, explican los portavoces del encuentro artístico. La Friedrichstraße es símbolo de la división entre pobres y ricos en la ciudad, indicó el vocero de la Bienal, Denhart von Harling.

Sin embargo, en una ciudad con numerosas heridas aún abiertas, no todos entienden el objetivo de la obra. Los muros son horribles o fuera esto son algunas de los mensajes que pueden leerse en la superficie.