Los resultados preliminares de un estudio realizado por científicos del Centro de Investigación y de Estudios Avanzados (Cinvestav), del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y de la Secretaría de Salud (Ssa) muestran que 56.4 por ciento de niños y niñas de la población escolar en la ciudad de México presentan obesidad o sobrepeso.

De acuerdo con el avance de la investigación titulada Genética de la obesidad en la infancia y la adolescencia, que fue dado a conocer ayer por el Cinvestav mediante un comunicado, 29.9 por ciento de los menores en edad escolar presentan problemas de sobrepeso y 26.5 por ciento ya tienen obesidad.

El estudio revela que sólo 43.6 por ciento de los menores están dentro de los parámetros normales.

Esta investigación es parte de un plan maestro de salud en desarrollo para abordar el problema de obesidad en los menores y se realiza en cuatro unidades deportivas del IMSS en la ciudad de México, en la que participan niñas y niños de entre 6 y 12 años de edad, que con base en su índice de masa corporal y otras características se clasifican en tres grupos: obesos, con sobrepeso y no obesos.

La investigación es encabezada por Jaime García Mena, del departamento de Genética y Biología Molecular del Cinvestav; Miguel Cruz López, de la Unidad de Investigación Médica en Bioquímica del IMSS, y Ana Isabel Burguete García, del Instituto Nacional de Salud Pública de la Ssa. Y si bien aún no arroja datos concluyentes, sí marca una tendencia porque se realiza en una población compuesta por varios sectores sociales y sirve para continuar con otros estudios, opinaron los investigadores.

Para García Mena el incremento de la obesidad en la infancia y la adolescencia se debe al estilo de vida actual; ahora los niños pasan más tiempo en casa que realizando una actividad física al aire libre, lo cual se combina con una mala alimentación.

Agregó que los mexicanos presentan tendencia a tener sobrepeso u obesidad por herencia genética, lo que se agrava bajo las condiciones actuales de vida. Esto trae en consecuencia otros padecimientos por complicaciones de salud, entre los que destacan diabetes, síndrome metabólico e hipertensión.

La investigación genética de la obesidad en la infancia y la adolescencia tiene el propósito de hacer una caracterización del problema, al iniciar con una fase descriptiva en la que se analiza la herencia genética cromosomal y todos los parámetros que caracterizan al padecimiento como sus aspectos bioquímicos y antropométricos, señalaron.