El cambio y la revolución son siempre motivos profundos de la ética genuina y del pensamiento crítico, afirmó Víctor Flores Olea tras. Señaló que un comportamiento plenamente válido, desde el punto de vista de la ética, está siempre fundado en sólidas consideraciones de la realidad, ya que considera sus contradicciones e injusticias, sus abusos, excesos y arbitrariedades, y es aquel que pretende abolirlo y transformarlo en alguna medida.

Al participar en la mesa Ética y pensamiento crítico, como parte de los Diálogos por la Regeneración de México que organiza el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), Flores Olea sostuvo que para Andrés Manuel López Obrador resultan centrales las cualidades éticas del político y del gobernante, quienes además han de poner en práctica una visión crítica de la realidad. López Obrador ha conducido su campaña dentro de estos criterios, por ello resulta un candidato excepcional frente a los otros.

Por su parte, el antropólogo Armando Bartra sostuvo que este año la disyuntiva es: o nuestras carencias, nuestros temores nos llevan a continuar en la república del odio que estalla durante los gobiernos del PRI y es llevada a sus últimas consecuencias, abismada, por los gobiernos del PAN, o construimos una república solidaria, fraterna, construimos una república amorosa.

A su vez, el también antropólogo Héctor Díaz Polanco afirmó que se ha superado el concepto de que la moral no era parte de los problemas que debía resolver la izquierda; en todo caso, dijo, lo que se debe desmantelar es la moral impuesta por el pensamiento neoliberal, “nos enfrentamos a un sistema moral cuya característica es, aunque parezca paradójico, su sentido antihumano, es decir, contrario a la vida de los humanos en sociedad. Esta moral oligárquica se contrapone y busca disolver a otra forma mortal que tiene como característica estar orientada a lo común y fundada en un mínima plataforma de interés por el otro.

Cerró la ronda de ponentes el economista Carlos San Juan, quien sostuvo que en estas elecciones de 2012 esta nación en crisis puede encontrar otro rumbo y sentido en beneficio de todos los mexicanos. De este tamaño es el desafío de nuestros días.

Para responder a esto habrá que respetar reglas y usar los instrumentos a la mano, el ritual electoral, esta política monopolio de unos pocos, regulada por instituciones con déficit de confianza, en un espacio público controlado por los medios, con segmentos importantes de videociudadanos absortos en las imágenes y en el consumo, no es arar en el desierto, nos alcanza con ello.