Aclara Behring Breivik que su intención era crear una especie de Al Qaeda para cristianos
Narra ante el tribunal la forma en que asesinó a jóvenes en la isla Utoeya el pasado 22 de julio
Sábado 21 de abril de 2012, p. 26
Oslo, 20 de abril. Resulta fácil pensar que es una locura, pero hay una diferencia entre violencia política y locura en el sentido médico
, afirmó este viernes Anders Behring Breivik, el multihomicida que el año pasado atacó un campamento de jóvenes militantes del Partido Laborista y que hoy expuso las causas ideológicas de su agresión ante el tribunal que lo juzga desde el lunes de esta semana.
Hay que estar desemocionalizado y para eso hay que entrenar
, dijo Breivik con su ya conocido estilo de hablar, sin aparentes remordimientos.
Algunos familiares de los 77 muertos asistieron al salón del juzgado para escuchar el testimonio decisivo del hombre de 33 años, expuesto a una pena máxima de 21 años, que podría purgar en la cárcel o en un centro siquiátrico. Breivik se empeñó en rechazar el análisis siquiátrico de su persona, que lo considera esquizofrénico paranoide, para destacar: la cosa es sencilla, estoy en plena posesión de mis facultades mentales, no soy un caso siquiátrico, soy penalmente responsable
.
Para efectuar sus ataques el 22 de julio pasado –la detonación de una bomba en el centro de Oslo y la cacería de jóvenes en la isla Utoeya, próxima a la capital noruega–, Breivik estudió y comparó el trabajo de grupos armados con fines políticos, como la separatista Euskadi Ta Askatasuna (Patria Vasca y Libertad) y Al Qaeda.
La debilidad de ETA es que teme a la muerte y no cree en la vida después de la muerte. Esa es la debilidad de movimientos marxistas. La ventaja de Al Qaeda es que glorifica el martirio
, afirmó.
Según su recuento, Breivik pasó cientos de horas en Internet y vio varias películas para aprender métodos de la red del extinto Osama Bin Laden. Su intención fue crear una especia de Al Qaeda para cristianos
.
Al escuchar los detalles de los asesinatos, muchos de los presentes en el juzgado mostraron consternación.
Breivik dijo que cuando estuvo frente a los jóvenes, gritó: ¡Hoy morirán marxistas!
. Su intención era matar a la mayoría de las 564 personas que estaban en la isla, incluida la primera ex ministra Gro Harlem Brundtland, ex dirigente de los laboristas, a quien se le conoce como la madre del país
.
Estaba previsto que aquel día, Brundtland visitaría a los jóvenes laboristas, pero Breivik no se encontró con ella, a quien quería cortarle la cabeza mientras la filmaba y luego leer un texto y subir las imágenes a Internet
.
Breivik definió que sus actos fueron horribles
, pero los cometió, porque por mucho tiempo promovió sin éxito sus ideas.