Su gobierno señala que la disposición permitirá garantizar los objetivos en el sector
El Banco Mundial califica de error
la decisión del país austral
Viernes 20 de abril de 2012, p. 2
Buenos Aires, 19 de abril. El gobierno argentino amplió a la empresa YPF Gas, distribuidora de gas butano y propano, la expropiación de 51 por ciento de las acciones de la petrolera YPF, ambas controladas por la española Repsol, unas decisiones calificadas este jueves de error
por el Banco Mundial (BM).
La declaración de utilidad pública de la mayoría accionaria de YPF trae aparejado que deba promoverse idéntica medida con relación a Repsol YPF Gas SA a fin de mantener la actuación concertada entre dichas empresas, que permitirá garantizar los objetivos perseguidos por el Estado nacional en el sector hidrocarburífero
, señala un decreto oficial publicado en la página web del gobierno.
Repsol YPF Gas pertenece actualmente a Repsol Butano SA (84.997 por ciento), a Pluspetrol SA (15 por ciento) y a accionistas particulares (0.003 por ciento), precisa el decreto.
La empresa se dedica a fraccionar, envasar, transportar, distribuir y comercializar gas licuado de petróleo.
“La decisión de ampliar la expropiación a YPF Gas, publicada hoy (jueves) en el Boletín Oficial, obedece a que la empresa opera como el principal distribuidor del Programa Garrafa para Todos, que se destina a atender las necesidades básicas de los sectores de más bajos recursos que no tienen acceso a la red”, señala el gobierno.
El Ejecutivo consideró que Repsol YPF Gas cumple una actividad esencial con relación a la política hidrocarburífera de Argentina
.
Decisión equivocada
En Washington el presidente del BM, Robert Zoellick, criticó la expropiación a Repsol.
Creo que es un error y creo que es un síntoma de lo que vamos a tener que vigilar: si bajo presión económica, los países optarán por políticas nacionales, autárquicas, si respondieran más al nacionalismo, proteccionismo
, declaró Zoellick en rueda de prensa al abrir la asamblea semestral del BM.
Creo que tomaron la decisión equivocada
, zanjó.
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner, que ignoró advertencias y quejas internacionales, agradeció la noche del jueves a los partidos políticos, incluso los principales de la oposición, el apoyo al proyecto.
Opositores radicales socialdemócratas (segunda fuerza política del país), socialistas, peronistas disidentes y centroizquierdistas votarán en general la iniciativa, rechazada por el líder de la derecha en Argentina, el alcalde de Buenos Aires, Mauricio Macri.
En 2011, Argentina importó hidrocarburos por 9 mil 300 millones de dólares y se estima que este año este monto se elevará al menos a 12 mil millones de dólares, mientras subsidios oficiales al consumo de gas a particulares y empresas son recortados paulatinamente.
Con los mercados de crédito cerrados tras el impago de 2001, el gasto para la compra de hidrocarburos representa una seria presión para el gobierno argentino, que depende sobre todo del superávit comercial para aprovisionarse de divisas.
El gobierno de Cristina Fernández adoptó la medida tras acusar a Repsol-YPF de no invertir lo suficiente para aumentar la producción de hidrocarburos que requiere el país, acusación que la empresa niega.
El proyecto de ley de expropiación será tratado el miércoles próximo por el Senado argentino, donde se presume será aprobado, y luego será girado a la Cámara de Diputados, para su aval definitivo. El oficialismo tiene mayoría en ambas cámaras.