La Comisión Nacional de Hidrocarburos (CNH), vigilante de las actividades de explotación de crudo y gas, advirtió que mientras no se dispongan de los recursos presupuestarios suficientes para este órgano rector la industria petrolera nacional se mantendrá sin la regulación y la supervisión necesarias en temas tan importantes como la seguridad industrial.

Por lo tanto, este órgano regulador, presidido por Juan Carlos Zepeda, solicitó el apoyo del Congreso de la Unión para que se canalicen con oportunidad los recursos necesarios para dar cumplimiento a las actividades y a los mandatos de ley. Para cumplir con las tareas estratégicas de supervisión y evaluación de riesgos, entre otras actividades, se requieren 95 plazas adicionales a las 48 existentes.

La CNH fue creada como resultado de la reforma energética de 2008, pero desde su nacimiento el gobierno federal la condenó a ser un ente supervisor decorativo y débil, al no proporcionarle presupuesto, instalaciones ni el personal necesario.

En una misiva envida el pasado 29 de marzo de 2012 a los presidentes de las mesas directivas del Senado, José González, y de la Cámara de Diputados, Guadalupe Acosta, recordó que con las modificaciones a la Ley Federal de Derechos del 18 de noviembre de 2010 se fijó aplicar una tasa de 0.03 por ciento del valor anual del petróleo crudo y gas extraído, por lo que la Ley de Ingresos de la Federación para el ejercicio 2012 previó un monto de 301 millones de pesos en el rubro de ingresos calculados por concepto del derecho, los cuales tendrían que destinarse íntegramente al presupuesto de la comisión.

Sin embargo, el presupuesto de egresos para 2012 solamente le asignó poco menos de una tercera parte de ese total, con apenas 96.8 millones de pesos, recursos insuficientes para dictaminar en este año 40 proyectos de exploración y explotación de hidrocarburos, dentro de los cuales destacan los proyectos Ku-Maloob-Zaap, Cantarell, Perdido y Chicontepec.

De este presupuesto, 94 millones 974 mil pesos fueron etiquetados en el capítulo de gasto de servicios personales y 2 millones para cubrir el gasto de operación del órgano desconcentrado, correspondiente al primer bimestre del año.

Lo anterior cobra especial relevancia ahora que el Senado de la República pretende ratificar el acuerdo sobre explotación conjunta de yacimientos petroleros transfronterizos firmados en febrero pasado entre el gobierno de México y el de Estados Unidos.

El reporte anual del cumplimiento de actividades y metas programadas, que la comisión entrega al Congreso al finalizar marzo de cada año, se destaca que la Comisión no ha contado con el número de plazas suficientes para integrar las direcciones generales encargadas de los temas regulatorios y de supervisión, entre otras.