El papa Benedicto XVI viene a intervenir en la política interna del país con la pretensión de concretar el sueño de una religión política, sostuvo Carlos Fazio, articulista de La Jornada y autor del libro El eje Wojtyla-Ratzinger: ¿la dictadura del Papa?, que ayer fue presentado en la Fundación Heberto Castillo, en Coyoacán.

Fazio consideró que en su visita a México, Benedicto XVI posiblemente aborde el tema de la lucha del presidente Felipe Calderón contra el narcotráfico y la delincuencia organizada, para legitimar a bandidos como Genaro García Luna, titular de la Secretaría de Seguridad Pública, quien realizó el montaje televisivo del caso de la francesa Florence Cassez.

Acompañado de los teólogos María Van Dores y Jaime Laines, el especialista explicó que con la llegada de Benedicto XVI se tratará de modificar el artículo 24 constitucional sobre libertad religiosa para tener un país con valores cristianos.

El teólogo Jaime Laines coincidió con el autor del volumen y sostuvo que la Iglesia católica defiende siempre sus intereses y busca el poder frente al Estado, mientras el gobierno utiliza al poder jerárquico para legitimar sus intereses y su política.

El libro de Fazio habla de la dictadura del Papa, del clero, de una Iglesia que en sociedades modernas y posmodernas, secularizadas, laicas, plurales, heterogéneas, diversas y complejas, hoy no acierta a reubicarse como un referente contemporáneo de propuesta ética y humanista como lo demandan los signos de los tiempos, señaló el teólogo, quien es integrante del Observatorio Eclesial y del Centro Antonio de Montesinos.

Laines comentó que la publicación El eje Wojtyla-Ratzinger: ¿la dictadura del Papa? –editado por la agrupación Católicas por el Derecho a Decidir México– explica cómo han sido las relaciones Iglesia-Estado, la forma de intervenir de Juan Pablo II y ahora de Ratzinger, cómo se genera la legitimización de un Estado represor y violador de derechos humanos.

“La religión –abundó Laines– tiene ideología, nunca es neutra como pretenden algunos jerarcas y políticos. No está libre de los juegos del poder, como creación humana está sometida a todas las reglas del discurso y práctica humana y tiene interés y hay quienes la usan para sus pretensiones e intereses. La religión es tan mundana como cualquier otra persona humana e influye, legitima, justifica, aporta, obstruye, destruye, de eso habla el libro de Fazio.”

El volumen plantea algunas pistas sobre la matriz ideológica del eje Wojtyla-Ratzinger, los dos papas que en la transición entre dos siglos restauraron, en clave medieval, a una institución de dominio corporativo que generó división en su seno.

El también autor del libro En el nombre del Padre: depredadores sexuales en la Iglesia, dijo que Wojtyla y Ratzinger respondieron a una de las más clásicas amenazas de falsificación del fenómeno religioso: la tentación de dominar a Dios y de mantenerlo atado y bien atado, según la clásica expresión de la España franquista.

La obra de Fazio es un estudio sobre la imposición de métodos autoritarios e irrespetuosos de los derechos humanos dentro de la Iglesia católica. En 10 capítulos, el autor presenta un mapa de los ejes de la restauración de una institución de dominio corporativo.

El libro alude al hecho de que temas como libertad de expresión, libertad de investigación y derecho a la información han sido vulnerados durante los dos papados recientes.