Moscú, 19 de marzo. Rusia pidió hoy al gobierno de Siria que acepte inmediatamente la petición del Comité Internacional de la Cruz Roja (CICR) de instaurar una tregua de dos horas diarias que permita la realización de operaciones humanitarias en Siria, cuya capital fue escenario de violentos combates entre soldados y desertores.

El director del CICR, Jakob Kellenberger consideró, tras una reunión con el canciller ruso, Serguei Lavrov, que la situación humana puede empeorar en Siria si no se toman medidas urgentes para aliviar los efectos de un año de combates, que hoy se intensificaron en el barrio Al Mezzeh de Damasco, donde se ubican embajadas y oficinas de los servicios secretos.

Desde Londres, el opositor Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) dio cuenta de 25 muertos en todo Siria, entre ellos nueve civiles, pero otras fuentes opositoras en la zona de conflicto indicaron a Dpa que las víctimas mortales ascienden a 80 sólo en Damasco, de las cuales 50 eran soldados del régimen.

Medios sirios informaron que las tropas atacaron una guarida de terroristas en la capital y tres rebeldes y un miembro de las fuerzas de seguridad murieron en la redada.

Las tropas regulares también atacaron la ciudad de Deir Ezzo para capturar áreas controladas por el autodenominado Ejército Sirio Libre. Además, el OSDH indicó que los soldados desertores atacaron una caravana de seguridad en la ciudad de Derá, con saldo de ocho muertos.

Por lo pronto, expertos enviados por el emisario de la Organización de Naciones Unidas y la Liga Árabe, Kofi Annan, llegaron a Damasco para negociar una misión de observación que ayude a frenar las violencia.

Otra misión de evaluación de ayuda humanitaria, formada por la Organización de Cooperación Islámica y la Organización de Naciones Unidas, ya se encuentra en Siria y trabaja bajo dirección del régimen.