no vamos a caer en la tentación de privatizar Pemex
Lunes 19 de marzo de 2012, p. 4
Andrés Manuel López Obrador se precia de conocer la historia y valorar sus lecciones. Por eso escogió el 18 de marzo –74 aniversario de la expropiación petrolera– para rendir protesta como candidato presidencial por el Partido del Trabajo (PT), hacer del petróleo el tema central de su discurso, recordar a un presidente visionario y patriota
como Lázaro Cárdenas y dejar en claro, por si alguien tenía dudas, que no vamos a caer en la tentación de privatizar Pemex. Más vale que se sepa, pues no queremos dorar la píldora a nadie
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Es la tercera vez que rinde protesta, después de las realizadas como abanderado del Movimiento Ciudadano (antes Convergencia) el domingo pasado y del Partido de la Revolución Democrática (PRD) el viernes anterior. Así quedó formalizada la candidatura del tabasqueño por el Movimiento Progresista, conformado por las tres fuerzas políticas mencionadas.
La ceremonia se llevó a cabo a puerta cerrada en las instalaciones de la Expo Reforma, de la Cámara Nacional de Comercio de la Ciudad de México. Un lugar poco adecuado y hasta inseguro para acoger muchedumbres entusiastas. Por suerte, no pasó de tropiezos y apachurrones.
Esta vez se trató de un acto entre amigos, y López Obrador se encargó de subrayarlo cuando agradeció el respaldo del partido que lo ha apoyado sin regateos, en las duras y en las maduras. Sé que voy a seguir contando con el respaldo de ustedes para ir a esta campaña por la Presidencia y lograr entre todos y desde abajo el renacimiento de nuestro país
, subrayó.
Si hay unos que han apoyado, se entiende que hay otros que no. Desde la muchedumbre surgieron gritos para identificarlos y hacer los deslindes del caso: ¡Nosotros sí somos la izquierda real!
“¡Fuera chuchos traidores!” No fueron una ni dos veces. Cada vez que López Obrador aludía a los enemigos de la democracia o del pueblo, desde distintos puntos del local la gente le recordaba a todo pulmón, casi con enojo: ¡El enemigo también está en casa!
¡Aguas con el caballo de Troya!
Pero los reclamos no afectaron la pragmática tersura del encuentro, que también sirvió para reafirmar alianzas y restañar heridas. Por algo el delegado político del PT en Chiapas, Amadeo Espinosa Ramos, dio expresamente la bienvenida en el estrado a Alejandra Barrales, muy cerca de Miguel Mancera, ante quien perdió la candidatura para jefe de Gobierno del Distrito Federal. Hace apenas unos días hicieron las paces en una reunión privada, semanas después de que la perredista se negó a reconocer la candidatura de Mancera argumentando que no podía apoyar lo que siempre hemos reclamado
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Ayer todo volvió a ser sonrisas y concordia.
También atrajeron miradas la secretaria nacional del PRD, Dolores Padierna, y Manuel Camacho Solís, coordinador nacional de Diálogo para la Reconstrucción de México, aunque él no se salvó de algunos chiflidos cuando Anaya lo mencionó entre los notables en el estrado. No faltó el diputado petista Porfirio Muñoz Ledo, quien, aunque lucía muy cansado, aprovechó la ocasión para saludar y tomarse fotos con la militancia. Asimismo fueron mencionados públicamente Francisco Hernández Juárez, líder del sindicato de telefonistas, y el actor Jorge Arvizu, El Tata, famoso por su participación en programas cómicos de Televisa y protagonista de uno de los espots del Movimiento de Regeneración Nacional.
Por sus aportes al programa de López Obrador en materia de petróleo, sin duda fue pertinente la presencia de Javier Jiménez Espriú, ingeniero petrolero, ex funcionario de Pemex y una de las máximas autoridades en la materia. Lamentablemente, el presentador no supo leer el segundo apellido ni decir de quién se trataba.
El secretario general del PT, Alberto Anaya, tomó protesta a López Obrador. Después de conmemorar la expropiación petrolera y reiterar su rechazo a la privatización de Pemex, el ya can- didato presidencial señaló que en 29 años de privatización de empresas públicas no ha habido beneficios para la población, sólo se han enriquecido unos cuantos: En nuestro país, privatización ha sido sinónimo de corrupción, y ya no queremos más, porque no queremos corrupción
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Con este acto todo quedó listo para el inicio de la campaña de López Obrador en su segundo intento por llegar a la Presidencia de la República.
En sus marcas…