El retraso en la entrega de predios no utilizados para la construcción de la línea 12 del Metro por el consorcio Carso, Alstom e ICA ha impedido venderlos entre los anteriores propietarios o a terceros, para no dejar pendientes y recuperar parte de los mil millones de pesos que se erogaron en la expropiación, informó el gerente jurídico del Sistema de Transporte Colectivo (STC), Francisco Cervantes.

Hasta el momento se tienen identificados cinco predios susceptibles de desincorporar: calzada Ermita Iztapalapa 701 y 775, Sur 125A-4, Sur 127-12 y Sur 129-7, con extensiones entre 30 y 100 metros cuadrados, los cuales fueron utilizados para la construcción de 23 permanencias destinadas al personal de guardia para atender cualquier emergencia, y la construcción de retornos o mejoramientos viales.

Los anteriores dueños tendrán preferencia en la compra, cuyo precio será el mismo de la adquisición o expropiación, más la inflación, aunque su valor estará tres veces arriba con la puesta en marcha de esta línea. Las mismas condiciones aplicarán para los terceros interesados, para lo cual se contará con un dictamen valuatorio de la Dirección General de Patrimonio Inmobiliario, precisó.

El funcionario explicó en entrevista que la gerencia jurídica será la responsable de este proceso, por lo que hacemos las gestiones para que el consorcio nos los entregue; mientras, ocho personas acreditan la posesión de sus predios ante la Consejería Jurídica para acceder al pago correspondiente.

Además, se está en proceso de liberar 18 espacios temporales, donde no se podrán construir arriba de dos plantas o más de cinco toneladas por metro cuadrado, y el Metro tendrá que avalar el proyecto.

También se finiquitaron los pagos de ayuda y mudanza de establecimientos e inquilinos, aunque se negociaron plazos, al alterar la vida de la gente, pero el diálogo y la negociación impidió que se interpusieran solicitudes de amparo o suspensión del acto reclamado, comentó.

Hoy estamos ante la compra y expropiación más grande de terrenos en la historia del Metro y no enfrentamos ninguna demanda, ni tuvimos que mantener la fuerza pública para resguardar la obra, aunque sí se requirió en algún momento, destacó.