Tokio, 10 de marzo. Los japoneses conmemoran este domingo el primer aniversario del terremoto de 9 grados en la escala de Richter, el posterior tsunami y el siniestro nuclear en la planta de Fukushima, que dejaron al menos 15 mil 800 víctimas mortales y graves daños materiales en la región.

Muchos de los homenajes fúnebres se llevarán a cabo en las prefecturas del noreste japonés, así como en Tokio, la capital, con un minuto de silencio previsto en todo el país a las 14:46 horas local, cuando el terremoto sacudió al archipiélago.

El emperador Akihito, quien se recupera de una cirugía de bypass, asistirá a una ceremonia conmemorativa en el Teatro Nacional de de Tokio, junto con el primer ministro Yoshihiko Noda y los representantes de quienes perdieron a sus familiares en los desastres.

Simulacros de evacuación también se llevarán a cabo en todo el país para prepararse para futuros terremotos y tsunamis.

En la sede de la central de la planta nuclear de Fukushima, localizada en la prefectura del mismo nombre, una de las regiones más afectadas por el fenómeno natural, el presidente de la empresa Tokyo Electric Power (Tepco), Toshio Nishizawa, encabezará una ceremonia alusiva a la tragedia.

Tepco, la compañía encargada de manejar la planta, emitirá una disculpa pública una vez más.

Oración por los muertos

Antes del aniversario, algunos eventos se llevaron a cabo este sábado en Japón para orar por los muertos, incluyendo un servicio budista en un templo en la ciudad de Osaka con cerca de 16 mil velas que tendrán grabadas los nombres de las víctimas del desastre.

El terremoto dejó más de 15 mil 800 víctimas fatales, la mayoría de ellas en las prefecturas de Iwate, Miyagi y Fukushima, incluyendo cerca de 500 cadáveres que todavía permanecen sin ser identificados, aunque se habla de hasta 19 mil fallecidos.

Más de 3 mil personas en seis prefecturas continúan consignadas como desaparecidas.

El tsunami con olas de hasta 15 metros destruyó o dañó en su mayoría unas 330 mil casas y otros edificios en las tres prefecturas, pero la reconstrucción ha sido lenta, critican los damnificados.

El resto del mundo recordará también la mayor catástrofe ocurrida en Japón desde la Segunda Guerra Mundial y están previstas manifestaciones de ecologistas y opositores a la energía nuclear.

Por último, la canciller federal de Alemania, Angela Merkel, defendió la decisión de su gobierno de acelerar el desmantelamiento nuclear en su país y apostar por las energías renovables.