El problema en Ciudad Juárez, más grave de lo que parece
Sábado 10 de marzo de 2012, p. 7
Ciudad Juárez, Chih., 9 de marzo. Integrantes del Comité de Madres con Hijas Desaparecidas solicitaron apoyo a investigadores internacionales para detener a los responsables de secuestrar y asesinar mujeres de 1993 a la fecha, lo que no han hecho las autoridades mexicanas, subrayaron.
Francisca Galván, vocera y asesora jurídica de las activistas, afirmó que el problema es más grave de lo que parece, ya que en seis meses la autoridad localizó 14 osamentas en el valle de Juárez y tiene un registro de 115 desaparecidas
.
Las mujeres, conocidas como Las doñas, quienes con los expedientes de los casos entre sus manos exigen la presentación de sus hijas con vida, sostuvieron que tienen nulo acceso
a la justicia, porque el o los responsables de los homicidios están libres.
Francisca Galván expuso que las madres de las desaparecidas forman un grupo vulnerable, por el tipo de lucha que llevan a cabo, pero al mismo tiempo tienen gran fuerza; “a veces desfallecen, pero siguen en la lucha por encontrar a sus hijas.
Cuando los funcionarios de los tres niveles de gobierno las miran cara a cara se hacen chiquitos, porque ellas les dicen la verdad y les exigen que cumplan con su trabajo
, sostuvo.
Se oculta información
Durante un foro de acceso a la justicia realizado en esta localidad fronteriza, Francisca Galván acusó que los gobiernos se especializan
en ocultar la información, para lo cual han creado fiscalías, pero no hacen justicia a los familiares de las víctimas.
El Comité de Madres con Hijas Desaparecidas dio a conocer que se desconoce el paradero de más de 80 jóvenes de 2008 a la fecha.
Por ello pidieron el apoyo de investigadores internacionales especializados, para ubicar a los sujetos que privan ilegalmente de la libertad a las jóvenes, principalmente en el centro de Juárez.
En lo que va del año, la Unidad Especial que Investiga la Desaparición de Mujeres de la Fiscalía General de Chihuahua ha recibido 30 denuncias. En 19 casos las víctimas han sido menores de edad. La fiscalía reconoce la desaparición de al menos 222 de 1993 a la fecha, la mayoría menores.