Bruselas, 2 de marzo. Los dirigentes de 25 de los 27 países miembros de la Unión Europea (UE) suscribieron un pacto de mayor disciplina fiscal para la zona euro, lo que supone un triunfo para Alemania, que presionó a favor del acuerdo para tratar de evitar que se repita el descontrolado gasto que llevó a la crisis de deuda.

Sólo Reino Unido y República Checa no firmaron el Pacto de Estabilidad, coordinación y gobernanza que obliga a los 17 países de la eurozona a incorporar la denominada regla de oro, para equilibrar las cuentas europeas, limitando el déficit anual a 3 por ciento del producto interno bruto (PIB), a partir del momento en que entre en vigor, una vez que al menos 12 de los 17 miembros de la zona euro lo ratifiquen. También contempla sanciones casi automáticas para los socios que superen el límite.

Es un paso muy importante para restaurar la confianza en nuestra economía, señaló el presidente de la Unión Europea, Herman Van Rompuy, en una rueda de prensa al finalizar la cumbre de dos días en Bruselas.

Los países que no incorporen en su legislación esta regla, serán sancionados con multas de hasta 0.1 por ciento de su PIB y los que incumplan con los techos de déficit deberán someter sus presupuestos a la aprobación y vigilancia de la Unión Europea.

El tratado es un paso gigantesco hacia la responsabilidad, subrayó Van Rompuy.