El futuro de Mexicana de Aviación está en manos del juez Felipe Consuelo Soto, del conciliador y de Med Atlántica, aseguró el subsecretario de Transporte, Felipe Duarte, al anunciar que ayer por la tarde entregaría al juzgador un oficio en el que consta que la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) garantiza que entregará el certificado de operador aéreo en cuanto exista el convenio de acreedores y haya una sentencia que saque de concurso mercantil a Mexicana.

Agregó que en dicho documento también están garantizadas las rutas y slots de Mexicana, así como cada uno de los requerimientos del juez decimoprimero de distrito en materia civil, por lo que no existe ningún impedimento para que Consuelo Soto tome decisiones sobre la empresa y los inversionistas empiecen a disponer el dinero para los pagos.

Sólo entonces, dijo, podrá entrar la SCT a certificar las capacidades jurídicas, financieras, técnicas y operativas de Med Atlántica con miras a otorgar el certificado de operador aéreo, indispensable para el reinicio de operaciones.

En conferencia para fijar la postura de la SCT ante la falta de claridad sobre la existencia de recursos para capitalizar Mexicana, y la falta de información por parte del conciliador Gerardo Badín sobre el avance del convenio de acreedores, el jefe de la unidad jurídica, Gerardo Sánchez Henkel, dijo que la dependencia no se está deslindando de la situación de Mexicana, pero, precisó, el concurso mercantil es responsabilidad del juez, la nuestra es la concesión de Compañía Mexicana de Aviación, y no se puede entregar un certificado de operador aéreo condicionado como quiere el juez porque no existe en la ley y se trata de un documento que opera en México basado en la Ley de Aviación Civil, y en todo el mundo mediante los acuerdos de Chicago.

Felipe Duarte puntualizó que para que Mexicana pueda volver a volar es indispensable que se concluya el proceso de concurso mercantil, lo que implica que se suscriba el convenio de acreedores en términos de la Ley de Concursos Mercantiles, estableciendo la restructura de pasivos, así como que existan los recursos para la capitalización, todo esto para que Mexicana pueda salir de la situación de insolvencia en que fue declarada desde el 7 de septiembre de 2010.

A pesar de que la SCT rechazó que se esté deslindando del caso, el funcionario delimitó las funciones del juez y de la SCT en siete puntos: Mexicana solicitó el concurso mercantil, fue admitida en ese proceso y de manera unilateral decidió dejar de volar. En segundo lugar, dijo, el concurso mercantil es un proceso dirigido por el Poder Judicial a través del juez concursal. La SCT ha sido y seguirá siendo respetuosa de las decisiones del juez Consuelo Soto en su carácter de rector del proceso; de acuerdo con la ley él es el responsable de determinar el futuro de Mexicana de Aviación.

Duarte aseguró en su tercer posicionamiento que el conciliador de Mexicana es quien debe encargarse de proponer alternativas jurídicas y financieras viables para restructurar y conservar a la empresa; debe negociar las quitas a los adeudos y buscar alternativas de inversión para capitalizar, llegar al convenio con acreedores que debe ser aprobado por el juez y enseguida iniciar los pagos convenidos.

El funcionario continuó enlistando las obligaciones del conciliador, quien una vez con el convenio de acreedores firmado y aprobado y con el dinero de Med Atlántica en la mesa, debe atender a los acreedores en fila en orden de prelación.

En el quinto punto de su posicionamiento Felipe Duarte aseguró que la SCT ha facilitado el concurso al realizar verificaciones técnicas y administrativas; se tienen avances sobre el estado de las aeronaves; se han realizado vuelos de prueba y demostraciones. Pero, precisó en el sexto punto, sólo cuando concluya el concurso mercantil cuando pueda hacer todas las verificaciones pendientes.

Duarte concluyó la delimitación de funciones en el caso de Mexicana al señalar que la SCT también ha garantizado que las rutas y slots de Mexicana están salvaguardados y disponibles en términos de la normatividad aplicable.

Destacó que si en el pago a los acreedores Med Atlántica se queda sin dinero es un asunto que también deben atender el juez, el conciliador y los inversionistas, aunque, destacó Sánchez Henkel, se han logrado quitas hasta de 80 por ciento. Precisaron que la ley de concursos mercantiles es la que determina la cantidad de capital necesario para reactivar una empresa y no es la SCT la que debe sugerir cuánto deben invertir.