Luis Michel se convirtió en el héroe del Guadalajara al atajar un penal en el minuto 90
Tras ponerse dos goles arriba, el Rebaño Sagrado perdió la brújula y Guerreros casi saca la igualada
Lunes 27 de febrero de 2012, p. 2
Guadalajara, 26 de febrero. Chivas ganó un tanque de oxígeno al vencer 2-1 en su casa a Santos Laguna, impulsado por la especial visita del holandés Johan Cruyff, encargado de la reingeniería de la institución, quien observó con atención el encuentro desde el palco del dueño del equipo, Jorge Vergara.
El portero del Rebaño Sagrado, Luis Michel, se convirtió en el héroe levantado en hombros por sus compañeros, luego de detener al minuto 90 un defectuoso disparo de penal –cortesía del silbante Marco Antonio Rodríguez–, cobrado por Hércules Gómez. Antes, los locales hicieron un par de tantos por conducto de Marco Fabián, al 37, y Érick Torres, al 57.
La pobre asistencia al estadio Omnilife salió satisfecha acaso no con el futbol mostrado por su equipo, sino por el triunfo alcanzado por primera vez en la temporada, con lo que abandonó el sótano de la tabla general para ubicarse en el sitio 17, con cinco unidades, mientras que los laguneros descendieron al sexto lugar, con los 14 puntos que ya sumaban.
Aunque los pupilos de Ignacio Ambriz sufrieron de más, finalmente mostraron una actitud diferente sobre el terreno de juego, al disputar con ahínco cada esférico, y si bien lograron estructurar diferentes llegadas, se toparon con la buena actuación del portero santista Oswaldo Sánchez, ex de Chivas, o con la defensiva que cerró todos los espacios y obligaba al disparo de media distancia.
En los momentos en que el partido parecía no tener brújula, por el constante ir y venir sin acciones de mayor peligro, finalmente cayó el 1-0. Fue obra de Marco Fabián, quien recibió un centro de Omar Arellano que parecía no tener demasiada peligrosidad, pero alcanzó a conectar con la cabeza para abrir el tanteador, que provocó el estallido de los aficionados.
Santos no encontraba la forma de llegar en plenitud a la portería de Michel, salvo algunos intentos que no cuajaron y que hacían ver desarticulado al conjunto dirigido por Benjamín Galindo, quien para la segunda mitad mandó a la cancha a Carlos Morales y al español Marc Crosas, a la espera de renovar la actuación.
Aunque los anfitriones no mostraron un futbol de calidad, sí fue lo suficiente movido para mantener el control sobre las acciones, ayudados por el pobre accionar de los visitantes, que sólo a ratos parecían encontrarse sobre el césped, aunque sin oportunidad de cambiar el marcador.
Cuando parecía que las acciones finalmente cobraban equilibrio, Érick Torres se vio favorecido por un rechazo defectuoso del portero Oswaldo Sánchez, quien no pudo sujetar un cobro de tiro directo de Marco Fabián, que sin dudarlo sólo empujó para dar la segunda alegría de la tarde a sus seguidores.
Las Chivas tomaron el control del partido sin tener un juego espectacular, ayudadas por la inoperancia de Santos, que mostró una cara muy diferente a la que había venido enseñando en el torneo, pero tampoco podían remachar lo que parecía su seguro triunfo.
Sin pensarlo, al Rebaño empezaron a aparecérsele los fantasmas, en el momento en que Santos cobró confianza y exactitud con el pase de Crosas a Hércules Gómez, quien de cabeza cambió la trayectoria del esférico para encajarlo justamente en el lugar a donde nunca llegaría Michel, para firmar el 2-1. El silencio fue casi absoluto.
El juego cambió por completo. Guadalajara trató se mantener el control del balón, pero Santos buscaba aprovechar los minutos restantes para lograr el del empate con jugadas de arrojo.
Inesperada fue la actuación del silbante Marco Antonio Rodríguez, quien en el minuto final marcó un penal en favor de Guerreros, con lo que puso a temblar a los aficionados locales, que sentían el temor de quedarse sin la victoria.
Justicia divina, los reflejos del portero Luis Michel o el mal cobro de Hércules. Como haya sido, se combinó todo en una suerte de fortuna que llevó al guardameta a tirarse a su lado izquierdo para detener con una mano el esférico y luego asegurarlo entre sus piernas.
No se jugaron los cuatro minutos agregados por el árbitro, quien decretó el final del cotejo con sonoro silbatazo después de la heroica atrapada del portero local.
Antes de abandonar el estadio, el portero de Chivas, Luis Michel, se dijo muy contento por haber atajado el penal. “Esto es una señal de que vamos bien, de que estamos haciendo adecuadamente las cosas bajo el mando de Nacho Ambriz (el técnico)”, para agregar que debe destacarse que el conjunto ya venía teniendo un mejor funcionamiento en estos tres partidos recientes, donde los detalles nos habían costado. Hoy dimos un gran partido, sí hubo sus detalles, pero al final se dio el triunfo
.