Unos mil 500 de los 6 mil reclusos del fuero federal en las cárceles de la ciudad de México son catalogados como de alta peligrosidad, calculó el jefe de Gobierno del Distrito Federal, Marcelo Ebrard Casaubon.

Explicó que su gobierno ha transferido algunos presos federales a otras cárceles, pero al ritmo que ha podido el gobierno federal. Lo que esperaríamos es que si termina su reclusorio se pueda hacer aceleradamente, para que estén esos presos en prisiones de alta seguridad, sobre todo los que son de alto riesgo.

Luego de inaugurar la Campana de la Amistad México-Corea, en el Monumento a la Madre, al preguntarle si se reforzarían las medidas de seguridad en los reclusorios del DF para evitar que se generen conflictos como los ocurridos en el penal neoleonés de Apodaca, Ebrard Casaubon señaló que desde hace dos años se ha invertido en el programa de construcción, de revisión y de control de accesos, entre otros. Sin embargo, admitió: hay que estar atentos, siempre es un riesgo.

Señaló que lo urgente es acelerar la construcción de penales de alta seguridad. Recordó que en la ciudad ya se inició la edificación de dos, lo que permitirá reducir la sobrepoblación y el nivel de riesgo. Sólo en nuestros reclusorios hay más de 40 mil personas privadas de su libertad.

Ebrard recordó que en la reunión más reciente del Consejo Nacional de Seguridad se informó que el personal para el nuevo penal federal de alta seguridad ya estaba contratado desde 2011.

Expresó su confianza en que antes de concluir este año se cuente con un nuevo penal de alta seguridad, porque efectivamente es un problema en toda la República.

El candidato del partido del sol azteca al Gobierno del Distrito Federal, Miguel Ángel Mancera, se manifestó por despresurizar los penales, pues uno de los riesgos en las cárceles es la sobrepoblación.