Consciente de que el nado sincronizado es una de las disciplinas que no promete medallas en los Juegos Olímpicos, la entrenadora Adriana Loftus hace un llamado a que se aprecie la clasificación a Londres, como en las recientes citas veraniegas, a las que sólo asisten los mejores deportistas del mundo y entre esos espera enlistarse el dueto que integran Nuria Diosdado e Isabel Delgado.

La preparadora no había hecho la cuenta de que si el dueto califica a la justa veraniega ella asistirá a sus quintos juegos, en los que se inició como entrenadora desde Seúl 88. Sólo ha faltado a Sydney 2000 y Pekín 2008.

Esa estadística no es algo que inquiete a la ex ondina que pasa la mayor parte del tiempo a la orilla de las albercas, entre las siete horas, en sesiones con el equipo y la dupla que se extienden hasta la noche.

La pasión es lo que me tiene aquí, es la única clave para alcanzar resultados y lo atribuyo a que me entrego, afirmó Loftus en entrevista al concluir la práctica en el Centro Nacional de Talentos Deportivos y Alto Rendimiento.

La expectativa es que las duetistas consigan uno de los 16 boletos disponibles en el torneo preolímpico que se disputará a mediados de abril en Londres.

También asistirá el equipo integrado por ocho nadadoras y aunque la entrenadora admite que la posibilidad de calificar es remota, sostiene que vamos pensando en que se puede y es importante participar en este preolímpico porque la única manera de crecer es medirte con los mejores.

En la prueba de equipos de la los juegos sólo se incluyen ocho países, cinco designados para el mejor clasificado de cada continente y los tres puestos restantes a ganar entre el resto del mundo, por lo que si hay potencias como Estados Unidos, Rusia, España y Japón, que no han calificado, es misión imposible, y Loftus lamenta que queden fuera naciones como México, pues fue onceavo en el Mundial de Shanghai 2011.

Sin embargo, está convencida de que el apoyo a las seleccionadas para desarrollar su preparación es por los resultados. Se precia de contar con una selección nacional de nivel más avanzado en relación con las anteriores, aunque la disciplina ha evolucionado tan rápido que, si bien se puede estar a un buen nivel mundial, en este momento no es una potencia.

Comentó que el respaldo actual es innegable para asistir a competencias de fogueo, sobre todo al contar con un grupo multidisciplinario con médico, preparadores físicos y especialistas que dan seguimiento a las ondinas.