En 2011 se diagnosticaron casi 20 mil nuevos casos; produce nueve fallecimientos por día
Se efectúa en Puebla la Reunión Anual Médica del Incan
Vital, buscar detección oportuna
Sábado 11 de febrero de 2012, p. 36
Puebla, Pue., 10 de febrero. En menos de 15 años se duplicó la prevalencia de cáncer colorrectal en México, enfermedad de la que en 2011 se diagnosticaron casi 20 mil nuevos casos. Es el cáncer del aparato digestivo más frecuente y a diario nueve personas mueren por esta causa, debido, en parte, al diagnóstico del mal en etapas avanzadas, aseguraron especialistas.
Otro tumor grave es el de ovario, el segundo ginecológico más frecuente, que al año es responsable de alrededor de 2 mil fallecimientos. México, de hecho, está entre las tres regiones del mundo con mayor prevalencia, de 5.5 afectadas por cada 100 mil habitantes. En una situación similar están Asia y Australia.
La frecuencia del tumor ovárico también ha ido en aumento; se reportan alrededor de 4 mil nuevos casos por año, indicó Dolores Gallardo-Rincón, presidenta del Grupo de Investigación de Cáncer de Ovario de México.
Estos temas forman parte de la agenda de actividades de la 29 Reunión Anual Médica del Instituto Nacional de Cancerología (Incan), donde los especialistas resaltaron que ambos padecimientos representan un reto para el sector salud, porque los síntomas iniciales son escasos o nulos para el de ovario.
En cáncer colorrectal existen ciertas manifestaciones que se confunden con padecimientos comunes, a los que suele no prestárseles atención. Por eso, los afectados suelen esperar de ocho meses hasta dos años antes de acudir al médico.
Además, los médicos generales no suelen sospechar del cáncer colorrectal y, por lo tanto, tampoco recomiendan a sus pacientes estudios específicos para descartarlo. Y es que por los síntomas se confunde con amibiasis, por la presencia de sangre en las evacuaciones, explicó Germán Calderillo Ruiz, jefe de la Unidad Funcional de Gastroenterología del Incan.
Otras manifestaciones del también conocido como tumor intestinal son la pérdida de peso sin causa justificada, aumento de gas en el abdomen, sensación de plenitud, diarrea o estreñimiento y cansancio.
Las neoplasias colorrectal y de ovario están en estudio por parte de la Comisión Nacional de Protección Social en Salud (CNPSS), para incluirlas en la cobertura del Fondo de Protección contra Gastos Catastróficos, según informó el secretario de Salud, Salomón Chertorivski, hace unos días.
En la Reunión Anual Médica del Incan, los expertos dieron cuenta de los avances que hay en el tratamiento de estas neoplasias, principalmente por el desarrollo de medicamentos biológicos con efectos positivos para la mitad de los afectados que tuvieron un diagnóstico en etapas avanzadas, e incluso presentan metástasis, y para los cuales estas terapias les ofrecen una mayor sobrevida y con mejor calidad.
Los factores de riesgo asociados al cáncer colorrectal son la alimentación con alto contenido de grasas animales y proteína y baja en fibra, obesidad, falta de actividad física, alcoholismo y tabaquismo.
Respecto al cáncer de ovario, Gallardo-Rincón advirtió que la mejor alternativa para tener un diagnóstico temprano es un ultrasonido transvaginal con método Doppler, el cual se debería realizar a mujeres mayores de 45 años con supuestos problemas gastrointestinales, colitis en particular, que no logran controlar porque también es frecuente que los médicos piensen en estos males comunes en lugar del tumor maligno.
Las mujeres que se han sometido a tratamientos de fertilidad, así como quienes no tuvieron hijos o han utilizado terapias de remplazo hormonal, tienen mayor riesgo de desarrollar el padecimiento. La especialista aseguró que es totalmente curable si se detecta en etapas tempranas, aunque el tratamiento es de alto costo.