Petróleos Mexicanos (Pemex) determinó aplazar indefinidamente las perforaciones del pozo exploratorio Puksón-1, localizado frente a las costas del norte de Veracruz, aseguró Fabio Barbosa.

El pasado 24 de enero Pemex confirmó mediante un boletín informativo la existencia de hidrocarburos en su pozo exploratorio Puksón-1, el cual era perforado frente a las costas del norte de Veracruz, a 61 kilómetros al oriente de la ciudad de Tuxpan, en un tirante de agua de 647 metros.

Fabio Barbosa Cano, experto en temas petroleros, explicó que esta determinación se tomó para no correr riesgos después del derrame en el Golfo de México ocurrido en 2010, ocasionado por una explosión en la plataforma Deepwater Horizon en el pozo Macondo, operado por Bitish Petroleum.

Afirmó que Puksón es uno de los pozos más desafiantes que ha intentado perforar Pemex: el tirante de agua o profundidad en el agua es de 647 metros, pero los estudios geológicos y de sísmica señalaron como objetivo una estructura hundida bajo las capas del subsuelo en otros 7 mil 600 metros. Así, la suma arroja una profundidad total de 8 mil 125 metros, de manera que es el más profundo perforado en el país.

Altas presiones y temperaturas

Sin embargo, la presión y temperaturas alcanzadas a esa profundidad hicieron desistir a Pemex de continuar las perforaciones y se optó por privilegiar la seguridad. Puksón fue taponado definitivamente, informó el experto.

Barbosa Cano, integrante del Instituto de Investigaciones Económicas de la UNAM, recordó que las operaciones comenzaron el 25 de marzo de 2011 con la plataforma Noble Max Smith, con experiencia en la perforación en Lankahuasa, en costas de Veracruz.

A principios de noviembre de 2011, el pozo se encontraba en 7 mil 480 metros de profundidad total y se podía esperar que muy pronto la plataforma Noble Max Smith comenzara los preparativos para las pruebas de producción.

Pero en las semanas siguientes apenas se alcanzaron otros escasos 150 metros, pues los trabajos toparon con bolsones de gas y altas temperaturas, es decir, se penetró en una zona difícil de elevadas presiones y temperaturas, que se resumen como zona HPHT, por sus siglas en inglés (High Pressure, High Temperature).

Seguramente hubo intensa discusión sobre las alternativas y al final se tomó la decisión de detener la perforación. Puksón no pudo llegar al objetivo programado y Pemex optó por privilegiar la seguridad. Puksón fue taponado definitivamente, afirmó.