El recrudecimiento de los enfrentamientos entre opositores y fuerzas públicas, el motivo
Domingo 29 de enero de 2012, p. 21
El Cairo, 28 de enero. La Liga Árabe anunció hoy la suspensión de la misión de observadores en Siria con el argumento de que los enfrentamientos entre opositores y fuerzas públicas se recrudecieron en los últimos cuatro días.
La medida del organismo panárabe se ajusta a las presiones de Estados Unidos, de países europeos y de monarquías del golfo Pérsico de detener la misión para no legitimar al presidente Bashar Assad, del partido nacionalista Baaz.
La suspensión fue decidida por el jefe de la liga, Nabil Arabi, y no por los cancilleres, que habitualmente discuten y determinan las acciones del organismo y sus delegaciones, dijo el director de las operaciones de vigilancia del ente panárabe, Adnan Khodair.
La misión de observadores llegó a Siria en la última semana de diciembre y tiene el objetivo de recabar información sobre la situación política en 15 regiones y 20 ciudades, donde hay un clima de agitación desde hace 10 meses.
Los observadores tienen que informar a la cúpula árabe sobre las acciones oficiales para detener la violencia, activar un diálogo nacional y liberar prisioneros. La misión ha sido cuestionada por opositores y los gobiernos extranjeros enfrentados con Assad, alegando parcialidad en favor del régimen.
En un comunicado, Arabi informó que la situación actual, en términos de violencia, no ayuda a preparar el ambiente que permita que todas las partes se sienten a la mesa de negociaciones
.
Arabi precisó que las agresiones no sólo se producen del lado gubernamental, sino también de los bandos opositores, con disparos de armas de fuego y bombas.
La suspensión de labores se hizo efectiva este sábado y se mantendrá así hasta que el Consejo de Ministros de Relaciones Exteriores de la Liga Árabe vuelva a reunirse la semana próxima.
La medida parece contradecir la decisión de Arabi del miércoles de prolongar la misión durante un mes, tras conocer un informe preliminar del grupo formado por 163 observadores, encabezados por el general sudanés Mohamed Ahmed Mustafá Dabi, en el que se hizo un reconocimiento a la actitud de cooperación del gobierno sirio.
En abierta discrepancia con el reporte de Dabi, Arabia Saudita y las otras cinco monarquías del Consejo de Cooperación del Golfo Pérsico –aliado de Estados Unidos y Europa– retiraron a sus delegados alegando que Siria no cumple sus ofrecimientos, no obstante que en el último mes liberó a cerca de mil detenidos por participar en las manifestaciones opositoras.
Un funcionario no identificado dijo que Siria lamenta y está sorprendida por la decisión de la Liga Árabe de detener el trabajo de la misión
. Señaló además que la medida busca ejercer presión sobre el debate en torno a la situación de este país, que se inició ayer en el Consejo de Seguridad de Naciones Unidas y continuará el martes.