Con antorchas, pancartas y consignas para exigir la salida de la rectora de la Universidad Autónoma de la ciudad de México (UACM), Esther Orozco Orozco, más de 200 trabajadores administrativos y académicos, así como estudiantes de esa casa de estudios, se manifestaron frente a la sede de la Comisión de Derechos Humanos del Distrito Federal.

El motivo fue exigir al organismo que dé curso a las quejas que desde hace casi un año presentaron contra la científica por el acoso, agresiones, discriminaciones y despidos injustificados en agravio de integrantes de la comunidad universitaria que han cuestionado la gestión de la rectora.

Ayer, poco después de las 18 horas, los inconformes marcharon del plantel Del Valle de la UACM, ubicado en la calle de San Lorenzo, hasta las instalaciones de la CDHDF, en avenida Universidad. Durante el recorrido los quejosos, algunos de los cuales portaban antorchas, lanzaron gritos de Orozco va a caer, Orozco va a caer y exigieron respeto a la autonomía universitaria.

Una vez que llegaron a su destino, los manifestantes organizaron en mitin en el que demandaron que se reinstale en sus empleos a cinco profesores que han sido despedidos de manera injustifica y que suspenda el proceso iniciado contra el maestro Claudio Albertini, a quien, aseguraron, se pretende separar de la institución por manifestarse contra Esther Orozco.

Mientras una comisión era recibida por personal de la CDHDF, los manifestantes dieron a conocer un pronunciamiento de la asamblea general de la UACM en el que afirman que desconocen a la rectoría y al segundo Consejo Universitario como órganos de gobierno legítimo, dado el nivel de corrupción, que ha degradado su función de representatividad de la comunidad universitaria.

En ese tenor, manifestaron que rechazan todas las actas que han emanado de esos órganos, a los que acusaron de crear un vacío de gobierno en la universidad, pues la figura de Esther Orozco ha sido negativa e incompatible con el modelo universitario, además de que ha convertido a la institución en un botín para grupos con intereses políticos dentro y fuera de la universidad.

Asimismo, acordaron que en una reunión de la asamblea general convocada para el próximo martes se defina un plan de acción para lograr que la rectora deje el cargo, y cesen los despidos injustificados de profesores y las agresiones contra quienes han mostrado una postura crítica contra Orozco Orozco.

Entre las propuestas que se discutirán en esa reunión destaca la realización de una huelga de hambre escalonada, es decir, que un grupo de profesores y estudiantes ayunen durante dos días, para luego ser relevados por otros compañeros.